jueves, noviembre 26, 2009

Votar por Piñera y el sentido común Vol.2


Dado el poco tiempo que queda antes de las elecciones, continuaré con esta sección antes de que se haga obsoleta.

(sin)razón 3: "Él ha sido un empresario exitoso, sabrá muy bien como administrar el país y hacerlo crecer"

Tal vez uno de los elementos más repetitivos de su hostigante y maqueteada campaña sea el famoso "vamos a crear un millón de nuevos empleos". Lo curioso es que esta impresionante cifra (que jamás aclara el tipo de empleos que se crearán) tiene un supuesto no menos impresionante: un crecimiento sostenido del 6%. La OCDE pronostica que Chile crecerá un 4,1% en el 2010 y, fuera de cámaras, el equipo económico de Piñera tiene muy claro que esta ya es una promesa que no se podrá cumplir. Pero las campañas -ya lo sabemos- poco tienen que ver con la verdad y mucho con la propaganda, la mentira y la promesa vacía. El "ofertón" como le gusta decir a algunos.
La cosa es que la entonación de dicha muletilla de campaña no es menor. Ese "vamos", hace ver que la creación de empleos es algo que está en manos de quien encabece el gobierno y no de las PYMES y Empresas que concentran la empleabilidad en este país. Es cierto, las políticas fiscales y laborales pueden facilitar o dificultar las condiciones para que privados contraten mano de obra -donde lamentablemente la precarización de las condiciones parece ser la condición exigida para disminuir el desempleo-, pero en ningún caso el sujeto activo en la baja del desempleo es el Estado.
Pero suena bien. En boca de un tipo que "le da" trabajo a tanta gente, aparece como creíble que él sea el que le va a dar un millón de empleos a los cesantes de este país.
Piñera sabe esto y lo explota. De algún modo ha logrado instalar en el sentido común de muchos votantes desideologizados/desinformados que su éxito en el mundo privado es traducible y extensible a todo el país.
Si extremamos el recurso, sería como decir que tener un millonario en el gobierno aumenta la probabilidad de que este país nos haga millonarios a todos.
Más todavía si insiste en la idea de que él proviene de una familia de clase "media".
¿Qué mejor foto para la clase media aspiracional que ver uno de los "suyos" transformándose en uno de los más ricos de Chile y premiarlo por eso con el más alto cargo político?
Parece diluirse esa sabiduría popular que indica que "nadie se hace rico de manera honesta en una generación".

Sabido es que Piñera no es querido en el gremio empresarial. Más allá de sus arranques en el Banco de Talca, recuerdo que siempre me interesó saber porqué Ricardo Claro lo había echado al agua en un programa de televisión con la famosa radio Kyoto (en un patrón que al parecer se repite). Y las malas lenguas dicen que mientras Piñera era un incipiente Ingeniero Comercial, Claro lo envió a estudiar la viabilidad de instalar el sistema de las tarjetas de crédito en Chile. Piñera anduvo de gira un buen rato y concluyó que en Chile no era el momento. Quedándose, de pasada, con todos los contactos y estudios correspondientes. Un año después funda "Bancard" y trae el sistema de endeudamiento plástico arrancándose con los tarros.
Y eso dejó picado a Claro por varios años hasta su venganza.
Y de pasada, le generó una pésima fama entre el gremio.

Lo cierto es que Piñera, en rigor, no es un empresario.
Mucho menos un "emprendedor".
Es más apropiado referirse a Piñera como un financista o como un especulador (vale decir, alguien hábil en decidir dónde meter la plata), que como un personaje que ha montado una industria y se ha relacionado con sus subalternos. Fuentes del empresariado aclaran que nunca ha formado parte de sus gremios (Sofofa o CPC) y que no es considerado como "de nuestro mundo", sino más bien "de los asuntos especulativos".

De hecho, son elocuentes algunas de las historias que circulan en torno a su carácter como "jefazo". Entre las azafatas de LAN que te toque atender a Piñera es motivo de desagrado e incluso miedo, nada de orgullo. No sólo porque se dice que es descortés y ni siquiera mira (mucho menos contesta) cuando lo saludan, sino porque son conocidas sus historias de mal carácter como cuando Gina Ampuero pasó a llevar su pie que estaba extendido en el pasillo. Piñera le habría dicho ¿Tú quieres pisarme? ¡Yo te voy a enseñar como se pisa!
Gina quedó con dos falanges fracturadas y un mes de licencia. Luego del incidente, el jefe directo se ensañó con Gina pesándola antes de cada viaje. Gina terminó sucidándose.

En otra ocasión, una demora por motivos técnicos hizo que el candidato fuera a la cabina del piloto a gritarle ¡Despega huevón!
El piloto lo expulsó de la cabina, pero tuvo que ir a dar explicaciones del hecho a la jefatura de la empresa.
A eso súmele las quejas por hostigamiento a los sindicatos y malas condiciones laborales.

Pero la verdad de las cosas es que poco tiene que ver Piñera mismo con esas políticas. Él es sólo uno de los dueños. Uno de los dueños que "deja pasar" -como cuando despidieron una embarazada de Chilevisión- y permite que en sus empresas los abusos ocurran.
Del mismo modo en que LanCargo pagó su multa asumiendo una colusión, el pagó otra por la compra de acciones luego de una reunión de directorio. Compra que le reportó varios millones por esa "pasada".
Piñera se defiende diciendo que el sistema de compra estaba "automatizado", que él realmente no dio una orden después de estar en una reunión donde se conocieron los resultados de la compañía.

Yo le creo.
Yo creo que en sus negocios el está poco (o nada) involucrado de forma directa y presencial. Tiene gente encargada que le cuida las finanzas y sistemas de movimiento de capitales para hacerlos rendir. Le creo que tampoco tuvo nada que ver con la colusión de las farmacias, donde su reacción fue deshacerse de las acciones de Farmacias Ahumada que tenía.

Le creo porque eso es lo que hace. Mueve con oportunismo sus platas hacia donde le puedan rendir.
Tal vez Chilevisión puede ser una excepción, dado el carácter estratégico de poseer un canal de televisión. Lo mismo con Colo-Colo, que lo acerca al mundo "popular" y replica el modelo Macri-Berlusconi.

Pero más allá de eso no pasa. No tiene que lidiar con las dificultades de formar una empresa ni con el "problema" de los trabajadores.
Por eso me parece un descaro que se plantee como emprendedor, e incluso como alguien que comprende a los trabajadores.
Las experiencias que se conocen, de quienes trabajan en sus empresas y han tenido que lidiar con él, debiera hacer temer por ese millón de nuevos empleos.

Valga entonces esa aclaración que le tiró ME-O: "un millón de empleos no es un millón de esclavos".

¿Cuál será el costo de ese crecimiento y esos empleos prometidos?

Piñera no se enterará. Nunca lo ha hecho.

Por Favor, reAcciones

miércoles, noviembre 18, 2009

El gesto de la semana: "Cuando los debates convencen"


Si no me equivoco, fue para las celebraciones de este 18 de septiembre que estuve compartiendo en la playa con un amigo "de las pichangas" que además ahora está de jefe de prensa de la campaña de ME-O. Aproveché de preguntarle cómo iba la cosa (me dijo que no había mucho presupuesto y que ahora tenía que echar a uno de los periodistas, siendo que lo que él necesitaba era contratar más gente), cómo era trabajar con el candidato (básicamente me dijo que era un hiperactivo que no paraba nunca) y quién había refrescado -justo en fiestas patrias- esa entrevista con declaraciones "antipatriotas" de ME-O (me dijo lo que ya todos saben, que fue la hija de Piñera por Twitter).
En esos tiempos no tenía mi voto decidido y el "voto-útil-anti-concertación-que-reestructure-el-panorama-político" me era todavía bastante tentador. De hecho cuando me despedí de él creo que le dije: "Voy a votar por ME-O. Voy a ser otro joven urbano ABC1 más que lo hará."

Pero esto fue antes de los debates. Y si bien parece ser cierto que los debates no convencen a mucha gente de cambiar (o aclarar) su voto, debo decir que yo sí fui uno de los públicos objetivos. Sobre todo el primero, donde decidí mi voto y el último donde confirmé mi desencanto con Marquitos.

El primer debate estuvo marcado por la indiscutible irrupción de Arrate. Su discurso, soltura y solidez me volvió a recordar que con el voto se debe ser honesto. Que para instrumentalizar están las encuestas y que sólo por joder, yo también me declararía indeciso si me encuestaran (como el 20% de mentiroso/as que lo hacen).
Oir las ideas de Arrate me recordó (del latín re y cordis: "volver a pasar por el corazón") que votar se trata de apoyar aquél que mejor represente las ideas que uno tiene. Por muy mentirosa que sea la democracia representativa.

No recuerdo si fue en ese mismo debate o en el radial o en algún programa por esa misma fecha, pero hubo en el discurso de ME-O un elemento que me molestó por lo conveniente, hipócrita y evidentemente propagandista: en un momento se refirió que un determinado defecto (no recuerdo si era el conservadurismo o la cantidad de años en el circo) lo compartían tanto la derecha como la izquierda.
A priori, no tengo nada que negar. Sin duda hay varios defectos compartidos en ambas facciones. Lo que me molestó fue que por "izquierda" se refería a la Concertación. Creo que sólo para un derechista extremo o para alguien muy desesperado por desmarcarse de la estructura política, es sostenible considerar a la Concertación como "izquierda".
Me parece evidente que la sola presencia de la DC en la coalición, sumada a la negativa originaria de incluir a la izquierda "de verdad" (el actual pacto electoral no es un pacto político) debieran ser suficientes para no confundirse. Será una izquierda sin representación parlamentaria, que no llega al 10% nacional, pero nada que ver con la Concertación. Un poco de respeto.

Pero la confirmación final de mi malestar con ME-O fue el último debate de Anatel. En particular su "discurso de cierre". En éste se mandó prematuramente la frase: "Votar por Arrate es votar por Frei y votar por Frei es votar por Piñera".
A primera vista, esta frase tiene poco sentido y suena a un complejo malabarismo donde todos los demás candidatos son lo mismo y él es la única alternativa.
En una segunda reflexión -no muy sofisticada, por cierto- aparece que darle el voto a Arrate (en primera vuelta) y no dárselo a ME-O es facilitar que sea Frei quien pase a segunda vuelta (he ahí el "es votar por Frei"). Y como Frei es menos competitivo (según la CEP) que ME-O en segunda vuelta, va a ganar Piñera (he ahí el "es votar por Piñera").
Estoy lejos de querer ofender su intelecto, estimada lectora y estimado lector, al hacer lo obvio explícito, simplemente me interesaba evidenciar todo el cálculo instrumental que hay detrás de esa frase. Una frase que no deja de ser un "vota por mí para que no gane Piñera".

Es todo lo que me faltaba por escuchar. Ese discurso de los "sueños", la "juventud", "el futuro" y el "cambio", transmutado en el viejo chantaje político, el pragmatismo y la campaña del miedo. Prácticas propias de esos mismos dirigentes que tienen secuestrada la Concertación, como a él tanto le gusta denunciar.

Punto aparte el hecho de que Arrate con todas sus letras propuso un "acuerdo mínimo" a Frei y ME-O para derrotar a la derecha en segunda vuelta. Acuerdo sobre el que ninguno de los dos se pronunció. Ni siquiera Marcos "no votar por mí es votar por Piñera" Enríquez-Ominami.

Es curioso, pero tanto el primer como el último debate me hicieron conciente del sentido del voto, alejándome de ese odioso pragmatismo. El primero, gracias a Arrate. El segundo, a Marquitos.

Por Favor, reAcciones

P.S.: les recomiendo esta inspiradora carta abierta escrita por el ilustre Citizen Almeida.

jueves, noviembre 12, 2009

El Rock&Roll del momento: Ted Kaczynski, el Unabomber

Theodore John Kaczynski

Debo partir por agradecer la animada participación que los estimados y estimadas comentaristas dejaron en el concurso de la columna pasada.
En todo caso, no sé si la palabra "concurso" sea la apropiada, ya que no hubo un proceso de licitación transparente, las bases no estaban claras y jamás se habló de premios. La idea era que participaran nomás y que pudieran fantasear con la posibilidad, reapropiándonos -de pasada- de aquello que le llaman "terrorismo" y que sirve de excusa para los abusos de los Estados en prácticamente todos los países. No somos la excepción, y la aplicación de la "ley antiterrorista" en la Araucanía da fe de ello. ¿Cómo puede ser considerada válida la declaración de un testigo anónimo?

Agradezco también a quienes se lo tomaron a pecho y nos brindaron -justo esos días- la dulce coincidencia de poner bombas en TVN, Inacap, UCSH, BancoEstado de Concepción, Banco de Chile de Providencia, la 52ª Comisaría de Rinconada de Maipú, Municipio de Cerro Navia, Ministerio de Hacienda y Banco Itaú de Apoquindo. Aunque todas estas eran falsas, la intención es lo que vale.
Y mención aparte para quienes pusieron bombas reales en el Banco BCI del Hotel Marriott y BancoEstado de Recoleta. Como bien parafraseaba MEFISTO en los comentarios, la realidad supera a la ficción.

Pero en esto de las bombas "con contenido", es necesario rendir un tributo contemporáneo, a modo de cierre. Y agradezco a "La poderosa muerte" por haber recordado al personaje en cuestión en los comentarios de la columna antepasada.

Ted Kaczynski es un hombre que se lo tomó muy en serio en su momento. Nada menos que durante 18 años...
Este hijo de polaco-estadounidenses nacido en 1942 tenía todo el perfil para haberse trasformado en uno de los mátemáticos más importantes de nuestro tiempo: graduado en Harvard y doctorado en matemáticas por la Universidad de Michigan (su tesis fue premiada como la mejor del año en la universidad), ya a los 25 años oficiaba de profesor asistente en la Universidad de California, Berkeley. Cargo que dejó dos años más tarde. Se mudó a una pequeña casa de sus padres en Illinois, para luego de dos años retirarse a sobrevivir en una cabaña en Montana sin luz ni agua que él mismo había construido, cazando y recolectando para comer.
En mayo de 1978 envió su primera carta bomba a Buckely Crist, profesor de ingeniería en materiales de la Universidad de Northwestern. Crist dudó y llamó a la policía. La bomba le estalló al policía que la abrió dañándole la mano, pero nada grave. Esta primera bomba era algo precaria y resultó más bien fallida.

Al año siguiente otro envío postal hiere a un estudiante en la misma universidad y meses más tarde un paquete postal estalla dentro de un avion de United Airlines. El avión no explotó, pero tuvo que aterrizar de emergencia porque salió mucho humo y hubo gente con principios de asfixia.

Después de esto, se transformó en un asunto federal y el FBI pasó a llamar el caso "Unabomb" (una sigla de "bomba en universidad y aerolíneas").

En junio de 1980, Percy Wood presidente de United Airlines es herido por un envío postal. Posteriormente, entre 1981 y 1982 tres nuevos ataques dejan dos heridos en la Universidad de Vanderbilt y en la de Berkeley.

En 1985 se producen cuatro atentados: un paquete bomba estalla en el departamento de computación de la Universidad de Berkeley, otro alcanza a ser desactivado en las oficinas de la Boeing Corporation en Washington, un docente es herido en la Universidad de Michigan y en una tienda de computadores en California muere un vendedor que inspeccionó un extraño paquete dejado en las inmediaciones. La primera víctima del "Unabomber", como lo comenzó a llamar la prensa.

Dos años más tarde, en 1987 se repite el modus operandi, pero sin resultado fatal: es herido un vendedor de una tienda de computadores en Salt Lake City.

Seis años después, un nuevo atentado explosivo postal atribuido al Unabomber hiere al genetista Charles Epstein de la Universidad de California. Horas más tarde es herido por otro paquete explosivo David Gelertner, especialista en computación.

¿Se va adivinando cuál es su público objetivo?

En 1994 ocurre la segunda muerte. En San Francisco Thomas Mosser, vicepresidente y director general de una empresa de publicidad es victima de otro atentado postal.

Finalmente, en 1995 comete su último atentado fatal: el presidente de la Asociación Forestal de California Gilbert P. Murray, muere al abrir un envío postal explosivo de Kaczynski.

En Septiembre de ese año Kaczynski escribe al New York Times y al Washington Post una carta donde promete terminar con los atentados a condición de que se publique lo que se llamó su manifiesto. Un texto de unas 35.000 palabras titulado "La sociedad industrial y su futuro".

Reproduzco a continuación el párrafo inicial:

La Revolución Industrial y sus consecuencias han sido un desastre para la raza humana. Ha aumentado enormemente la expectativa de vida de aquellos de nosotros que vivimos en paises «avanzados», pero ha desestabilizado la sociedad, ha hecho la vida imposible, ha sometido a los seres humanos a indignidades, ha conducido a extender el sufrimiento psicológico (en el tercer mundo también el sufrimiento físico) y ha infligido un daño severo en el mundo natural. El continuo desarrollo de la tecnología empeorará la situación. Ciertamente someterá a los seres humanos a grandes indignidades e infligirá gran daño en el mundo natural, probablemente conducirá a un gran colapso social y al sufrimiento psicológico, y puede que conduzca al incremento del sufrimiento físico incluso en paises «avanzados»

Puede leer el texto completo aquí. Se los recomiendo para cuando tengan tiempo, no deja títere con cabeza.

Pese a que fue una decisión polémica, el FBI accedió a que se publicara el manifiesto, ya que podía ayudar a que alguien lo reconociera. Hasta el momento habían elaborado 4 perfiles distintos y no había ninguna pista clave.

Y así fue.
Año y medio más tarde, después de darle muchas vueltas al asunto, su hermano David decide dirigirse al FBI. Había reconocido en Ted muchas de las ideas del manifiesto, pero hubo una expresión que le era muy familiar, porque la utilizaba su padre: "no puedes comerte el pastel y al mismo tiempo tenerlo".

Con eso el cerco comenzó a cerrarse, hasta que fue detenido en su solitaria cabaña y dos años más tarde, condenado a la cadena perpetua que cumple actualmente por declararse culpable de los atentados que asesinaron a 3 personas y dejaron a 23 heridas. El testimonio de su hermano fue vital para salvarlo de la pena de muerte. Ahí argumentó que Ted tenía desórdenes mentales desde pequeño.

De su niñez se sabe que su coeficiente intelectual de 167 motivó que lo pasaran directamente de 5º a 7º grado cuando era niño y las matemáticas que le resultaban demasiado fáciles hicieron que nuevamente lo adelantaran de curso, terminando su enseñanza escolar 2 años antes. Sin embargo, nunca pudo adaptarse a sus compañeros de mayor edad, quienes lo molestaban y excluían de los juegos. No dejó de ser el niño raro-genio-nerd-aislado que está condenado a pasarlo mal, sobre todo en la cuna del matonaje escolar.

Mientras estuvo en Harvard (donde entró a los 16 años) participó en estudios de personalidad del doctor Henry Murray, los que en realidad eran subvencionados por el macabro MK Ultra (proyecto de la CIA iniciado en 1953, destinado al control mental). Las situaciones estresantes a las que fue sometido Ted serían la explicación de su aversión a toda forma de control. Sobre todo el mental y el hecho de que la tecnología e investigación universitaria se pusiera a su servicio.

Dejando fuera -por un minuto- el que haya muerto gente y otros resultado heridos, es impresionante el grado de lucidez que hay en su discurso.

¿Son sus actos la consecuencia comprometida de un diagnóstico así?

Desde el punto de vista de esta sección: Rock sin compromisos ni miramientos.

Por Favor, reAcciones

martes, noviembre 03, 2009

Y usted, ¿dónde la pondría? II (¿Y a quién echaría a la hoguera?)

Un retrato de Guy Fawkes, un terrorista con festividad incluida

Ya que en varias partes de nuestro país se ha naturalizado -vergüenza ajena que sentimos varios, gran negocio para quienes venden dulces con motivos de calabazas y monstruos- celebrar "Halloween", propongo importar otra festividad extranjera que también llama a la creatividad y de pasada hace reflexionar un poco sobre la política (y los políticos).

Esta festividad tiene lugar los 5 de noviembre y se le llama "Guy Fawkes" (en honor al hombre que pretendía hacer volar el parlamento inglés en lo que se llamó "el complot de la pólvora") o "Bonfire night" (noche de la hoguera).

Hace poco más de 3 años, publicaba aquí el primer llamado a concurso en este blog. La idea era que inspirados en la figura de Guy Fawkes (y su atentado que pretendía llamar la atención de los intolerantes religiosos) los estimados lectores y las estimadas lectoras pudieran dar rienda suelta al pequeño terrorista que todos -algunos más reprimidos que otros- llevamos dentro y declararan en dónde les gustaría poner una bomba.

Ahora, como replicar el concurso tal cual es una falta de creatividad demasiado grosera, añadiremos una innovación: tal como los ingleses han cambiado con el tiempo el muñeco de Guy Fawkes por otras personalidades (como el papa, Margaret Thatcher e incluso Tony Blair) a las que echan a la hoguera, la estimada lectora y el estimado lector podrán elegir su personaje a ser quemado.

Evidentemente el espíritu de este concurso es absolutamente lúdico y si le da algo de cargo de conciencia reivindicar actitudes violentas, puede imaginar que el lugar donde pondría su bomba estará absolutamente vacío y que la personalidad que echaría a la hoguera es sólo un muñeco.

Si aún así los resquemores le vienen de sólo imaginarlo, me temo que este blog jamás será de su gusto.

Resumiendo:

¿Usted dónde pondría la bomba y qué muñeco/a echaría a la hoguera?

Como repetir los orígenes de esta festividad sería un abuso para quienes ya lo leyeron en su momento, no me queda más que recomendarles este artículo en castellano dedicado al tema.

Si usted puede leer en inglés, he aquí un sitio completísimo.

Por Favor, sus objetivos.

P.S.: Es muy probable que usted lea esto pasado el 5 de noviembre, si es así no se abstenga de participar. Este concurso estará abierto toda la semana.