No hay salud (y tampoco quieren que haya)

El característico morbo del water de tren. Foto publicada por Fluzo.

Bastante escandalosa ha sido la noticia de que nuevamente una mujer dio a luz en el baño del hospital San José. A diferencia de la anterior -una ciudadana peruana-, ahora se trataba de una compatriota, por lo que el escándalo fue mayor. Una muestra más de que ni el trato de las autoridades ni el de la prensa es igualitario con nuestros vecinos residentes en el país.

En fin, la cosa es que la imagen de tener un hijo en el baño es fea, sucia. No importa que el baño esté quirúrgicamente sanitizado, es un baño: el lugar de los desechos biológicos.
Y los recién nacidos no caben en esa denominación.

Bueno, el ex director de la Clínica Las Condes (donde Piñera también tiene participación) y ahora Ministro de Salud, se sumó a la indignación con un frase para el bronce:

“aquí el enfermo es el sistema de salud que tenemos en Chile, que está de rodilla, está anticuado”

No sólo eso, también sostuvo que:

"(...) quiero pedirle perdón a los trabajadores de salud que laboran en condiciones indignas y eso tenemos que corregirlo, sino vamos a tener estos problemas una y otra vez”

Pueden ver un mayor detalle de las declaraciones aquí.

Parece imposible estar en desacuerdo con el diagnóstico que el doctor hace de nuestra salud pública.
Y esa declaración de intenciones difícilmente podría encontrar razones para oponerse.

Pero lo cierto es que el diseño comunicacional del gobierno funciona así: los discursos son simples, apelan al sentido común y carecen de elementos concretos que sean "cobrables".
Es más, fíjense cada vez que alguien los hace pronunciarse por un tema complicado (como las privatizaciones) o por medidas concretas con plazos claros: siempre dirán "lo estamos estudiando". Y lo armónico de todo esto es que la prensa del duopolio se ha dedicado en cada una de sus publicaciones, revistas, cuerpos de diarios y ediciones especiales a convencernos de que los nuevos administradores son gente preparada y con muchos estudios.
Entonces, si dicen que van a estudiar algo, pues hay que quedarse tranquilos. ¿Qué acaso no saben que esta gente es muy estudiosa?

Bueno, esta desidia frente a las frases rimbombantes y promesas de estudios tiene un correlato práctico en la "realpolitik": la agenda de meter (auto)goles sigue avanzando y las medidas impopulares aprovechan para ir colándose.

¿Qué tienen que ver las nobles intenciones de Mañalich con todo esto?
Pues, por si no lo sabe, el recorte presupuestario le arrebató 31.000 millones de pesos a Salud.
Ya sabe usted, el terremoto y la reconstrucción. Mire que hay que pagarle los materiales a las tres grandes cadenas...

La indignación de Mañalich y sus frases son muy empáticas con todos quienes se sirven del sistema público, pero se ve bastante difícil mejorar las condiciones de los trabajadores de la salud o el poner de pie a este "enfermo que está de rodilla" con menos plata.
Más bien pareciera que quisieran agravarle su condición. Algo así como negarse a proporcionar un tratamiento.

Yo entiendo que estén desesperados por pasarle plata a sus amigos, ya sea a los que hacen mediaguas rápido o a Sodimac, Easy y Construmart, pero es un poco descriteriado hacerlo a costa del sistema de salud pública ¿o no?

Ojalá este invierno no se venga más crudo de lo que ya pinta...

Por Favor, reAcciones

Cambio de Gobierno II

No hay por donde salvarlo...

(Nota: Pese a que la intelección de esta
columna no requiere la lectura de
"Cambio de Gobierno I", puede usted leer
dicha columna pulsando aquí.)

Han pasado 40 días, una "cuarentena" podríamos decir, desde el tiritón cambio de mando.
Y me parece un tiempo prudente para entregarles un segundo reporte desde este pequeño bastión del servicio público.

I El clima laboral

Podríamos partir con lo que a cualquier mortal asalariado le preocuparía en una situación así: los despidos.
Resulta que la mayoría de la gente sigue. Hasta el momento sólo se han ido el 1 y el 2 (cosa que iba a suceder aunque ganara la Concertación) y poco a poco fueron renunciando durante el mes de Marzo los jefes regionales del servicio. Cargos que también son de confianza política.
Pero además de eso, seguimos los mismos.
Incluidos algunos que ocupaban cargos de confianza en la administración anterior. Me resulta muy ajena la idea de que si estás trabajando en un lugar por tu lealtad con un determinado partido y/o coalición, no renuncies solito cuando tu nuevo jefe pasa a ser alguien de un partido y/o coalición al cual te oponías (y frente al cuál tu partido y/o coalición declara ser oposición).
En fin, he visto gente haciendo cosas que escapan a mi concepto de dignidad para conseguir una pega, supongo que mucho hay de eso en quienes quieren mantenerla...

Si bien hay varios servicios en los cuales han ocurrido despidos "masivos" de gente, el nuestro -pequeño y poco estratégico para nuestras nuevas autoridades- se mantiene ajeno todavía a esas "purgas". Pero sabemos, todos los que estamos en el aparato del gobierno, que esto dura sólo hasta Diciembre. La razón es muy sencilla: la gente que está de planta es muy difícil de echar. Tiene que mandarse algún desatino gigantesco para que le abran un sumario, lo que ni siquiera es garantía de que la echen.
Nos quedan los a contrata y a honorarios. El gran grueso de los funcionarios públicos.
En ambos casos estamos hablando de vínculos que duran como máximo un año. Esto quiere decir que automáticamente el 31 de Diciembre el gobierno tendrá un panorama con muchos cargos vacantes y sin el ruido innecesario de despedir a alguien.
Por mientras, tienen prácticamente 10 meses para aprender como funciona todo, identificar a quienes les interesa mantener, a quienes no quieren seguir teniendo y así, el 1º de Enero del 2011, tener trabajando a quienes quieran. O a quienes puedan traer, mejor dicho.

Asumo que a estas alturas las lectoras y lectores no se compran el tema de "gobernar con los mejores". Me atrevo a decir que habemos varios que nunca lo creímos desde el comienzo.
Sería bastante extraño (y algo fascista) asumir que los "mejores" están solamente de la Democracia Cristiana a la derecha.
Así como es extraño asumir que el éxito profesional en el mundo privado o el académico son garantías de excelencia en lo público.

Lo cierto es que para casi todos es un hecho que no tienen gente. Y los nombramientos de gente sin experiencia o con los papeles manchados no hacen más que confirmar lo que antes se presentaba como prejuicio.
Para quienes estamos "adentro", esto es más evidente aún, puesto que se observa como asesores, directores y todo tipo de cargos de mandos medios son rellenados con gente sin experiencia alguna y cuyo único mérito es tener afinidad ideológica con la derecha (y algún grado de amistad o confianza con la nueva autoridad que encabece el servicio).

En nuestro caso, fuera de los directores regionales, sólo han nombrado un cargo en la dirección nacional del servicio: jefe de gabinete. Es un administrador público de una universidad regional, con militancia en la UDI y conocidas opiniones conservadoras en temas como el aborto. Fuera de eso, dicen por aquí, ningún mérito que valga la pena destacar.
Fue presentado por los nuevos 1 y 2 en cada oficina y parecía bastante amable.
Su primera "aparición pública" fue por estos días. Y la razón fue la bella imagen que encabeza esta columna.
Resulta que poco tiempo después del cambio de mando empezaron a llegar correos del departamento de comunicaciones explicando de forma didáctica cómo meterse a la intranet y activar el logo para tenerlo como firma electrónica en nuestros correos institucionales.

{Me permito una pequeña digresión antes de continuar: el departamento de comunicaciones -por su obvio carácter estratégico- es uno de los candidatos número uno a ser "intervenido". Esto, algo que todos sabemos y que debe ser un fatasma para ellos mismos, ha llevado a que tengan una inusual actividad desde que llegaron: fueron los primeros en implementar el logo y no contentos con eso, elaboraron un fondo de pantalla (a la altura del logo) para que esté en todos los computadores. Aquello, a su vez, sucitó un debate vía correo institucional "con copia a todos" en los que varios empezaron por preguntar si acaso era obligatorio. Unos decían que no querían sacar la foto de su familia, otros, más chistositos, mandaban la foto del departamento en sepia, vestidos de vaqueros, diciendo que sería una pena tener que sacarla.
El envío de mails duró todo el día y a nosotros nos advirtieron bien temprano que no pescáramos y que no nos metiéramos.
Sabio consejo: el mail que cerró esta cadena fue el de la nueva 2, quien aclaraba que no era obligatorio, aunque sí iba a estar en aquellos computadores disponibles para el público.
Después de eso, en lo único que pensábamos era cómo cada correo era un dato para nuestra 2 (psícologa organizacional). Cómo se mostraban solitos los que sacan la vuelta y tienen tiempo para hacerse los graciosos, quiénes eran los que se mostraban como más "resistentes" y "conflictivos", y quiénes los más "mamones"...}

Vuelvo al tema. La cosa es que en un comienzo nadie se entusiasmaba mucho con la idea de poner su nombre y funciones debajo de ese logo para cada correo que enviáramos. De hecho, la gran mayoría ni siquiera utilizábamos el logo antiguo.
Pero este da vergüenza.
La cosa es que comunicaciones insistió un par de veces y luego la jefa de nuestro depto. nos pidió que lo hiciéramos. Fin de la historia.

Pero el viernes pasado llegó el primer mail "con copia a todos" del nuevo jefe de gabinete que les mencionaba. Su primera "aparición pública".
Ahí nos solicitaba incorporar la "firma institucional" (con el logo) dándonos las instrucciones para hacerlo. La finalidad, nos decía, es "homogeneizar" nuestros correos institucionales y proyectarles una imagen más institucional. La idea era hacerlo durante el mismo día para que para el Lunes 19 estuviera operativo en TODOS los correos.

Queda claro que no tienen lugar esos pequeños espacios de resistencia hacia los símbolos del nuevo régimen.
Y se aprovecha también de dejar en claro quiénes son los que mandan y la importancia de la homogeneidad (acordarse de las chaquetitas rojas, los cascos blancos para el primer consejo de gabinete, o el hecho de haber estudiado en la PUC) y de la imagen institucional.
Lo raro es que preocupándoles tanto eso, paguen 100 millones (que todavía nadie aclara de dónde salieron) a la agencia del hijo del senador Larraín y la ministra Matte para hacer un logo tan feo, poco funcional y sin ninguna coherencia en su composición.

II La experiencia y la excelencia

La inexperiencia de los nuevos jefes, por otro lado, se traduce en ciertas actitudes que acusan un nerviosismo de quien no sabe como funciona la cosa y le teme al equivocarse. Estas últimas semanas han sido muy intensas por el trabajo que tenemos comprometido a esta altura del año, pero también por los encargos urgentes que 1 y 2 nos han intercalado. Entre ellos, lo referente al discurso del 21 de Mayo.
Probablemente en algún momento de mucho ocio usted se preguntó cómo diablos se hacía el discurso de la cuenta pública del Presidente al Congreso. En rigor, es bastante simple: cada servicio le manda a Secretaría General de la Presidencia un informe con lo que hacen, lo que históricamente han hecho y lo que ha sido desde el 21 de mayo del 2009 al 21 de mayo del 2010. Lo que tiene un dejo surrealista, porque tienes que hablar de logros de un mes y medio antes de que ocurran realmente.
En fin, la cosa es que toda esa información está y es costumbre tenerla a mano. Pero los nuevos se asustaron y no les llegó el correo donde les indicaban tener el informe listo para enviarlo al ministerio del cual dependemos.
Se les vino la noche, llamaron a reunión urgente con todos los jefes de departamento y 1 hora antes de la hora de salida se le solicitó a todos los funcionarios sacar la tarea adelante. Salimos 3 horas después de lo debido. Por hacer algo que básicamente ya estaba hecho, pero que sobregiró a los nuevos mandamases.
El recado era clarito: "Si alguien no se puede quedar, puede venir a mi oficina a explicarme sus razones cuando quiera", decía 1.
Las puertas están abiertas, como les gusta decir a todos los nuevos gerentes de lo público...

III Las puertas están abiertas

Les había contado antes cómo esta frase funciona como muletilla universal para todos los nuevos jefes al momento de llegar. Habíamos referido también el sarcástico doble sentido que tiene la frase, pero no nos habíamos imaginado cuál podía ser la aplicación práctica real de esta consigna.
Resulta que "las puertas abiertas" han operado sacando lo peor del mediocre y asustado funcionario público chileno. En un intento algo patético y desesperado por cuidar la pega y ganarse la confianza de los nuevos 1 y 2, esta política se ha transformado en una tránsfuga instancia de pelambre, aserruchamiento de piso y apuñalamiento por la espalda a otros compañeros.

Dicen que se ha prestado para llevar los rumores más insignificantes y el espionaje más mezquino que pudiera pensarse. "Divide y vencerás", decía Julio César.
Insisto, hay muchos que pierden la dignidad por conservar el trabajo. Y se suponía que era el trabajo lo que dignificaba...Por suerte que aquí nos mantenemos aislados y al margen.
Lo peor de todo esto es que quienes espían y traicionan son tontos útiles: serán fundamentales de aquí a Diciembre para seleccionar a los candidatos a la cesantía. Pero lo triste e inevitable es que ellos también estarán en la lista: nadie quiere trabajar con alguien que vende tan fácil su lealtad.
Nadie quiere trabajar con gente en la que no se puede confiar.
Eso sí, hay que concederles a los jefes la funcionalidad de la estrategia aplicada...

En fin, la nueva forma de gobernar.

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El Rock&Roll del momento: tres momentos post-terremoto

No hubo caso: el tata se nos asustó con el terremoto

Momento 1: 5 de Marzo Tony Levin Stickmen en el Teatro Providencia (Nescafé de las Artes).

Estaba por cumplirse una semana desde el terremoto y pese a algunos rumores que indicaban la suspensión del evento, el concierto ocurrió. Tal como los mismos músicos querían.
De alguna forma, Tony Levin defendía la idea de que trayendo su música para acá, hacían un aporte dentro de todo el clima trágico que invadía. Una idea que una gran cadena de venta de instrumentos ha transformado en vehículo publicitario.
Algo les había adelantado aquí de que llevaba meses con mi entrada comprada, esperando a uno de los músicos que más admiro en el mundo. Más encima venía acompañado de un grandísimo en la Batería (Pat Mastelotto, también de King Crimson) y de otro stickista talentoso (Michael Bernier).
Desde una perspectiva que bien puede ser considerada egoísta, debo admitir que el terremoto me impidió disfrutar este concierto como hubiera querido. Los ánimos que a uno lo rodeaban estaban más vinculados con la tragedia, la empatía con quienes sufrían, el voluntariado y las donaciones. De alguna forma, intentaba asomarse un poco de "culpa" por desear en los días previos que el terremoto y caos del aeropuerto no impidieran el concierto.
Pero no sólo eso.
El terremoto insensibiliza. Por un buen tiempo. Es evidente que alguien con conocimientos en psicología puede explicar esto mucho mejor, pero lo cierto es que el terremoto nos deja "la vara alta" o "curados de espanto" para vivir otras sensaciones. Nada nos impresiona mucho. Ni siquiera las fuertes réplicas. Ningún problema personal es tan importante como la tragedia de quienes no pueden encontrar el cuerpo de un hijo desaparecido, y todo sentimiento de gozo o deseos de pasarlo bien aparecen como inoportunos y egoístas...

El concierto fue excelente. Duró al menos unas 2 horas, con un muy buen show y ejecutado al nivel que uno espera de músicos de esta calaña.
Le hicieron los necesarios -pero siempre sorprendentes- guiños al público de tocar temas de King Crimson. Fueron tres: Red, Indiscipline y Elephant Talk (con la que terminaron). Y cada uno de ellos generó una gran euforia. Me parece de perogrullo afirmar que todos los presentes éramos fanáticos de King Crimson.

Antes del concierto había un mesón que vendía distintos discos y DVD's afines a lo que se iba a ver. Entre ellos, un disco de los mismos "Stickmen" que contenía las canciones nuevas cuya gira los traía por acá. En el mesón aseguraban que después del concierto los músicos iban a firmarlos.
Lo pensé un poco. Y debo admitir que me empujaron a hacerlo: salí, saqué 10 lucas en el cajero a dos cuadras y me compré el disco.
Al terminar el concierto, hice una fila que demoró alrededor de una hora hasta que me hicieron pasar, con otras 5 personas, a una salita donde tras una mesa estaban los músicos firmando los discos.
Todo esto debe haber durado un par de minutos como mucho. Los saludé a los tres, algo nervioso. Intercambié algunas frases, me hicieron algunas preguntas, fueron muy amables.
Me saqué la foto con ellos y salí con mi disco firmado. Un poco atontado.
Y es esta insensibilidad del terremoto. Ese momento, absolutamente calcetinero y adolescente, no lo pude vivir con la emoción que se merecía. Pero no lo olvidaré jamás, y la foto en el fondo de pantalla del computador de la pega se encarga de revivir un poco cada día esa emoción postergada.

Como nota al margen, Tony Levin donó toda su parte del concierto a "Un Techo para Chile". Sin embargo, no se lo dijo a nadie. No lo publicó en su blog (uno de los más antiguos de Internet, donde relata sus giras, entre otras cosas), ni hizo noticia a partir de eso.
Y pensar que hubo quienes se sentían solidarios por gritarle a todo el mundo que iban a donar el 5%.
¿Cómo supe yo? Pues por un conocido de nosotros que nos topamos a la salida. Trabaja en dicha organización y había ido a buscar el dinero donado.


Momento 2: 27 de Marzo, B.B. King en el teatro Caupolicán.

También tenía mi entrada guardada hace un par de meses. La gira lleva por nombre "One more time" (Una vez más), y pareciera avisar que el maestro se retira después de ella. Razón de sobra para ver al histórico guitarrista.
Pues no. Sonamos.
Resulta que El Rey se nos asustó con el terremoto y las réplicas y canceló el concierto. Con sus 84 años no está para darse el lujo de vivir remezones fuertes, así que ni se complicó. Chao nomás.
No puedo dejar de recordar a un amigo fanático de Metallica que no fue al recital de ellos por que estaba "juntando la plata para B.B. King". Me imagino cuántos más habrán postergado algún concierto o panorama sólo para esperar que te digan el momento y el lugar para ir a recuperar la plata de la entrada.
Demasiado mañoso el abuelito ¿o no?


Momento 3: 8 de Abril, Placebo en el Arena.

Me carga Placebo. Sobre gustos hay mucho escrito, así que me ahorraré de entrar en razones. Pero debo dejarlo consignado porque, en rigor, me incomoda situarlos bajo un rótulo de "Rock and Roll".
En fin...
La cosa es que el trío llegó, salió del aeropuerto y se los llevaron derechito a La Moneda, porque el presidente y el ministro de Cultura, Axel Schumacher, los estaban esperando.
Si bien Placebo se ganó unos puntos por tirarle palos a gente como Nelly Furtado, Alejandro Sanz o Franz Ferdinand (quienes donaron el 5% de sus ganancias) diciendo que "cuando haces algo de corazón das el 100%, no el 50%"; lo cierto es que todo el show de ir a pararse con Piñera y regalarle el disco firmado fue caer en un juego bastante chabacano.
Piñera -a diferencia de la Bachelet, con quien la mayoría de los artistas que se entrevistaron con ella eran los que pedían hacerlo- armó un espectáculo mediático para agradecer públicamente la donación y lanzó algunas palabras entre sacadas de Wikipedia y sobregiradas en adulación, que no hicieron más que acrecentar la poca credibilidad que tienen las frases que salen de su boca y aumentar aún más la brecha entre juventud y política, que de manera tan absurda se esfuerza por acortar.
Nada nuevo bajo el sol para la escasez de tino que ha tenido este gobierno en sus decisiones y nombramientos.

¿Estuvo en alguno de los dos mencionados?
¿También se quedó con cuello por B.B. King?
¿Fue a alguno de los del 5%?

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Bonus Track: Con la plata de la devolución de B.B. King compramos entradas para el 6º Show de Megadeth en Chile a relizarse el 30 de Abril. La gira que nos traen es la que conmemora 20 años del que muchos consideran su mejor disco: "Rust in peace", el que tocarán completo, junto a otras clásicas y una que otra de su último disco ("Endgame").
También está marcada por el regreso del bajista histórico de la banda, el gran Dave Ellefson.
El gran gesto es que las entradas tienen un precio único: nada de cancha Vip ni esos inventos para discriminar y segmentar con precios. Todos pagamos lo mismo y lo vemos desde donde queramos/podamos.

Virtudes privadas, vicios públicos

El actual gobierno tiene una capacidad de excelencia para cometer errores.
Llega a impresionar incluso a quienes no votamos por ellos.

Y claro, quienes insisten en defenderlos aluden a que "hay que darles la oportunidad", "están recién empezando", "hay que evaluarlos cuando hagan las cosas, no antes". Algunos más desesperados intentan hacer analogías con errores del gobierno anterior; y a los que ya no les queda nada, pues dicen "todos podemos comenter errores".

Puede ser. Pero hay un tema de expectativas.
Prometieron mucho y no lo han cumplido, sellando el hecho de que la política no es "el arte de lo posible", sino que "el lugar de la mentira", como nos decía en la universidad un desencantado profesor ex-militante.
Sobre todo las campañas, instancias de prometer lo imposible para ganar la elección.

Se prometió excelencia y prolijidad en los cargos.
En cambio, llenaron de gerentes con conflictos de interés sectoriales y de funcionarios de niveles jerárquicos cuya experiencia nada tiene que ver con las políticas públicas.
Tomemos el ejemplo de MIDEPLAN.
El ministro, Felipe Kast, se supone que está preparadísimo en temas de pobreza. Al menos eso es lo que nos tratan de decir los distintos brazos del duopolio.
Sabe taaaaanto el ministro más joven del gabinete, que incluso estuvo estudiando marxismo un año en Cuba y post-terremoto estuvo durmiendo en una mediagua. Para que nadie le venga con cuentos.
El detalle que olvidan los distintos "publirreportajes" que le han hecho en los diarios y revistas de Copesa y El Mercurio, es que jamás ha trabajado en su vida. Sólo ha estudiado. Y cuando volvió a Chile, al Instituto Libertad y Desarrollo, básicamente se dedicó a hacer campaña.
No sólo eso, nombró en la secretaría ejecutiva (un puesto altamente estratégico para la ejecución de las políticas públicas de protección social) a un amigo personal cuyo currículum es haber sido socio del negocio de la familia: la cadena de sandwichs Dominó.

Pero, es cierto, podemos estar juzgando anticipadamente. Hay que ver cómo se desempeñan.
En todo caso, no deja de ser curioso ese concepto de "excelencia". La idea que parecen instalar es que si te ha ido bien administrando una empresa, te irá bien gestionando las políticas públicas.
Y creo que es esto lo que distingue a esta derecha. No es realmente el hecho de que sean más "eficientes", sino que creen que el modelo de la empresa privada es EL modelo para aplicar en cualquier orden de cosas. Pese a las advertencias que hace algunos años hizo un Nóbel de Economía.

En una empresa el dueño (o a quien éste haya delegado la administración) dispone de la contratación y despido de sus empleados. Varias tienen la excelencia como criterio, lo que le da sentido a que incluso externalicen el proceso de contratación en empresas que recopilan los CV y hacen las entrevistas.
Otras no.
Simplemente prefieren hacer el proceso de forma interna buscando afinidad y confianza en los futuros empleados. Esto hace que muchos ejecutivos pongan en sus currículums el colegio donde estudiaron y las actividades extraprogramáticas que realizaron allí: saben que haber estado en el mismo colegio que el jefe (y/o donde tiene los hijos el jefe), o haber jugado en el equipo de Rugby es algo que le dará más puntos a favor que unos años más de experiencia laboral.
El caso extremo, y bastante recurrente, es poner de frentón a trabajar a los hijos o a los hijos de amigos o parientes en la empresa. Aquí el mérito importa casi cero. Se entiende como un "favor" y mientras el favorecido no se mande un pastelazo, perfectamente puede hacer carrera siendo un profesional del montón, pero con buenas conexiones.

Sin embargo, la derecha jamás toleró -y con mucha razón- estas prácticas cercanas al nepotismo y lejanas a la excelencia en la administración del Estado. Como es plata de todos los chilenos, hay que gastarla lo mejor posible.
Vinieron una serie de procesos de transparencia y modernización del Estado, entre ellos el Sistema de Alta Dirección Pública, que busca despolitizar cargos de alto nivel jerárquico, a través de un consejo que selecciona a la terna idóndea de profesionales que ocuparán el cargo por 3 años, prorrogable a otros 3.
Un ejemplo de un cargo elegido así es el que tenía Carmen Fernández de la Onemi. Luego de su renuncia, la derecha olvidó este sistema y nombró a dedo a Vicente Núñez, un constructor civil de la PUC (obvio), que había sido gerente general de Laborum.com...
Todo un experto en emergencias.
Después que la prensa les avisó que el nombramiento no podía ser definitivo, el gobierno tuvo que "aclarar" que sería provisorio.

El tema es que en varios nombramientos (gobernador del Bío-Bío, Cautín, Los Andes y Tierra del Fuego, por nombrar los más emblemáticos, pero no los únicos) los "head hunters" les han fallado. La acuciosa búsqueda de excelencia fue reemplazada por la recomendación del amigo y del conocido. En estos casos, los diputados de la zona.

Con el logo del gobierno siguieron sorprendiendo.
Se le pagó 100 millones a la agencia Hambre (actualmente tienen su página "en actualización"), sin licitación. Más allá de lo bello, armónico y bien compuesto que podamos considerar al logo, vale la pena decir que la agencia Hambre es propiedad de Hernán Larraín Matte. Hijo del Senador UDI y de la Ministra de Vivienda.
Todo queda entre amigos...
Según la propia agencia, el logo sería transitorio. Ojalá.

Esta semana al gobierno se le ocurrió la genial idea de otorgar un "Bono Abril" a las empresas constructoras de mediaguas. La idea es darle al empresario de la constructora 100 mil por cada mediagua entregada en la primera semana de Abril, 65 mil en la segunda semana, 40 mil en la tercera y 15 mil en la cuarta.
Este debe ser uno de los mejores ejemplos de hacer política pública con lógica de empresa privada. El gobierno dice no poder obligar a las empresas a producir más (leáse turnos de trabajo interminables), pero si puede "incentivar" a que se produzca más rápido. Es decir, que sean los empresarios los que se las arreglen para tener la cosa funcionando sin parar.
Lo peor de todo, es que esto es plata de todos los chilenos que va a parar directo al bolsillo de los empresarios por hacer lo que siempre hacen: obligar a trabajar a sus trabajadores y ganar utilidades por ello.
El calcular cuántas mediaguas más podrían construirse con estos recursos, o cómo podrían mejorarse sus condiciones de aislamiento térmico, sólo acrecienta la indignación.
Incluso dejando de lado importantes discusiones acerca de lo cuestionable que son como soluciones, lo "transitorias" que son realmente y que si acaso una entidad de voluntariado debiera ser la responsable de un problema que debe solucionar el gobierno, vale la pena mirar de cerca los supuestos tras este bono.

¿Por qué una constructora necesitaría incentivos?
¿Hay mejor incentivo que la alta demanda que están teniendo ahora y cómo aumentarán sus ganancias por el volumen vendido?

Si el gobierno cree que se necesita incentivar, entonces hay dos alternativas:

1) El gobierno cree que las constructoras están flojeando y no les interesa producir al máximo. Si en las condiciones actuales eso fuera cierto, el bono tampoco debiera servir, porque se está tratando con empedernidos despreciadores del lucro.

2) El gobierno cree que las constructoras podrían hacerlo más rápido, pero por conductos que serían ilegales y podrían costarles multas (léase jornadas extendidas, horas extras no pagadas, etc.)

¿Por qué no subsidiar la mano de obra entonces?
¿Por qué no utilizar mecanismos propios de un estado de excepción?

En vez de eso, hacen lo que cualquier empresario quisiera: que el gobierno les regale plata y no los moleste con legislaciones laborales.

Y la última joyita de la semana: "Manos a la obra"
Ese es el original nombre para la reconstrucción del país. El pequeño detalle es que nuevamente sin licitación pública, 3 grandes grupos económicos se aseguraron la entrega de insumos: Sodimac, Easy y Construmart.
Se repartirán 8 mil millones en partes iguales. Nada de apoyo a las Pymes (quienes ya se han manifestado en contra de esta medida) ni de esas promesas bonitas de campaña.
Como ya es costumbre con cada condoro de este gobierno, ya hubo algunas promesas vagas de comprarles algunos clavos a ferreterías regionales.

Como si fuera poco, el colega pop me advierte por interno que Sodimac pertenece a Bethia. Los mismos que compraron Axxion, ahorrándole impuestos a Piñera que bien habrían servido para la reconstrucción.
Todos los favores se pagan...

La nueva forma de gobernar.
La excelencia y la honestidad.
Las malas prácticas de la Concertación desterradas.

...y eso que todavía no llevan un mes en el poder.

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