martes, diciembre 18, 2012

Este Sábado 22


Al menos él tenía un refugio donde pasar la tormenta...
"Take Shelter" dirigida por Jeff Nichols (2012) y protagonizada por un gran Michael Shannon (de esos actores que uno no reconoce de nombre pero sí de cara), es tal vez la más oscura de la oleada de películas "apocalípticas" con que los estudios intentan hacer caja a partir de la histeria del "fin del mundo" - y algunos guionistas aprovechan para intentar mostrar historias (y personajes) límites. 
No es como que haya visto todas tampoco, ni cerca. Pero trazando extremos entre la comedia romántica light de "Seeking a Friend for the End of the World" de Lorene Scafaria y la estético-decadente "4:44 Last Day on Earth" de Abel Ferrara, "Take Shelter" envuelve en un suspenso con una temporalidad claustrofóbica que recuerda -guardando las proporciones- "El Resplandor" de Kubrick; ahí donde la de Scafaria saca sonrisas y emociones fáciles y la de Ferrara incomoda.

Nichols hace un interesante viaje a la soledad de la psicosis mezclado con la constante duda del "¿No me creyeron? Yo se los dije" que tensionan a Curtis, el personaje que encarna Shannon. No les voy a contar la película, creo que vale la pena verla, aún cuando puede que haya gente que la considere "lenta"...

Pero me interesa el simbolismo que ofrece el hecho de que desde el comienzo de la película Curtis tiene pesadillas apocalípticas, las que él interpreta como premonitorias. En otras palabras, él les otorga un status de realidad a dichos sueños, tomándolos como futuros que se realizarán (y que desea evitar).

Pese a que algunos de mis amigos creen que este viernes va a pasar "algo", soy -parafraseando a Romain Rolland (en una cita que Gramsci hizo suya)- un pesimista por intelecto y un optimista por voluntad.
Mi pesimismo, en todo caso, apunta a que nada sucederá este 21 de Diciembre. Y que lo grave no es que "el mundo siga igual", como anda diciendo gente por ahí: lo grave es que el mundo siga empeorando.

Pues bien, los astrónomos y físicos han despejado cualquier posibilidad de que algún evento (meteorito, explosión simultánea de todos los volcanes, alta actividad solar, etc.) catastrófico ocurra en dicha fecha.
Por otro lado, arqueólogos especializados en la cultura Maya se han visto -con muchísima razón- bastante impotentes por la poca visibilidad que han tenido en los medios de comunicación el verdadero dato que se ha obtenido del desciframiento del mal llamado "calendario Maya" que auguraría el fin del mundo este solsticio. 

Para explicarlo en sencillo (les he ido y les iré dejando links para profundizar), lo único que hay es una pieza arqueológica encontrada en Tortuguero (que pertenece a una colección privada y para la que arqueólogos sólo han trabajado con fotos de ella) y que menciona la fecha que es un punto equidistante entre la fecha que estaban contando hasta el rey de ese entonces y el futuro. En otras palabras, poniendo su presente con igual cantidad de años desde el pasado y hasta el 21/12/2012. No hay ninguna alusión al fin del mundo. Es más, de acuerdo a  los arqueólogos, no hay ninguna mención concluyente del fin del mundo en ninguno de los restos dejados por los Maya.

¿Cómo se llegó a desprender esa idea del fin del mundo entonces? Pues en la misma pieza de Tortuguero hay lo que parece ser una mención a la deidad del inframundo Maya (Bolon Yokte), aunque el deterioro impide ser definitivamente concluyente. Junto a éste hay una inscripción que inicialmente (esto fue en 1996) se interpretó con el verbo descenderá, lo que hoy por hoy dichos arqueólogos desmienten como una interpretación que puede ser errónea.

En resumen: no hay profecía Maya del fin del mundo. No de manera concluyente al menos.

Con todo, siempre puede quedar la duda del "¿No me creyeron? Yo se los dije". Y en este sentido, yo adscribo a la postura de Hume de que por estar acostumbrados a que las cosas han ocurrido de determinada manera, tendemos a proyectarlo al futuro. Aunque no tengamos garantías de que vayan a seguir sucediendo así. 
En otras palabras, no tenemos hoy certezas para negar tajantemente una situación improbable en el futuro. Algo así como el agnosticismo, si se permite el símil.

Y es aquí donde entra el optimismo de la voluntad: si bien no creo que vaya a acabarse el mundo ni que tampoco -por más que sea urgente y necesario- haya un gran cambio en la percepción (y por ende en la manera de relacionarnos entre nosotros y con el mundo), no se puede descartar del todo. Pero no se trata de eso el optimismo. Se trata de qué vamos a hacer el sábado 22.

Y creo que lo mejor que nos puede pasar a quienes queremos que el mundo cambie para mejor, y sobre todo quienes esperan este 21 que "algo", así como "externo", haga que todos construyamos ese mundo mejor de un día para otro; es que no suceda absolutamente nada.
Que este sábado nos demos cuenta que no necesitamos esperar nada desde afuera, que está en nuestras manos hacia donde queremos ir. Que nadie lo hará por nosotros y que justamente ese "cambio de percepción" y de forma de relacionarnos entre seres humanos y con el mundo en el que vivimos, parte por dejar de aspirar a algo por "sobre" nosotros, algo más allá de nosotros.

Eso es lo que me dice el optimismo, por voluntad: el gran cambio del 21 de Diciembre será cuando el 22 nos demos cuenta que aquello que esperábamos ver cambiar somos nosotros mismos.

Lo grave no es que se acabe el mundo, lo grave es que sigamos dejando que empeore.

Por favor, reAcciones

P.S.: Lo prometido es deuda: este es un video que recopila una charla doble en UCL por parte de una arqueóloga especialista en cultura Maya y un físico desmitificando el fin del mundo este viernes http://www.youtube.com/watch?v=KP_VWwkQUew&list=TLLK3wG39k_do&index=1

En este sitio de un arquéologo que ha descifrado los restos Maya pueden encontrar un didáctico "Preguntas y Respuestas sobre el 2012", un más elaborado "Qué no sucederá el 2012", el desciframiento de los restos de Tortuguero, y los de Corona donde se menciona el 2012 (pero esta vez el 23 de Diciembre).

Lamentablemente, estimadas y estimados, todo está en Inglés.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy buena película! y muy buena columna también. Que lástima que haya pasado tan desapercibida en la temporada de premios a principios de año, pero bueno, es de esperarse que los premios mainstream generalmente, por no decir siempre, dejan lo mejorcito fuera. Michael Shannon es seco. La escena en que está encerrado en el bunker con su esposa e hija...uff la tensión...y la escena final con la linda Jessica Chastain...que decir!

Juan Emar dijo...

Anónimo/a: gracias por rescatar a Jessica Chastain. Sin dudas ella es el otro pilar fundamental de la película...

La película pasó desapercibida, principalmente por ser independiente. Mea culpa aquí por expresarme de forma poco clara y hacerla aparecer como parte de la "oleada de estudios", sin precisar que en sí misma no es parte de ningún gran estudio.

Saludos

comment grossir dijo...

très belle façon de voir

Unknown dijo...

Tendrá que venir otro acabo de mundo para leer una columna suya? Besos!

Juan Emar dijo...

"La voluntad debe ser la única cosa en el mundo que cuando está desinflada necesita que la pinchen"
Felipito, de Mafalda.

Gracias por el pinchazo estimada. Pronto habrán novedades.

Besos