lunes, diciembre 28, 2009

Las elecciones desde "el gobierno"

La clásica foto "cómo han pasado los kilos" al interior de todo servicio público

Para variar, he hecho algo que podríamos considerar un vicio de periodistas (y sobre todo editores) de la prensa escrita: poner un título que promete mucho más de lo que efectivamente voy a escribir. Mea culpa.

Es cierto, en rigor trabajo para el gobierno. Pero es un servicio bastante chico que depende de un ministerio. Hace algunos años, cuando estaba metido en la gestión cultural y trataba de que el Estado me financiara proyectos, ganamos una plata de esta misma entidad donde trabajo ahora. En aquellos tiempos me llevé la impresión de que esto era bastante chanta y que faltaba seriedad.
Lo que era cierto.
Renunciaron directores, se echó gente, y afortunadamente ha tenido un aumento sostenido en su credibilidad y seriedad.

Aunque pueden pensar con justa razón que la recomendación viene muy de cerca...

Bueno, la cosa es que tenía mis prejuicios sobre este servicio y sobre lo que implicaba trabajar para un servicio público en general, y si bien es casi seguro que esto no es una "muestra representativa", bien vale la pena contarles un poco.

De partida, llegué a través de concurso público. No conocía nadie que trabajara aquí y no tenía ningún pituto. Fue un proceso de selección que tuvo tres etapas, incluido un ejercicio de trabajar y preparar un informe con una base de datos que no conocía. Casi 6 meses después de mi última entrevista (esa en la que te dicen que estás listo, pero que tienen algunos problemas administrativos que resolver) me llamaron para decirme que podía empezar a trabajar. Yo había dado la pega por muerta y me habían contratado recientemente en la consultora donde boletié por más de un año.

Pues bien, me motivaba mucho más trabajar aquí por ser una pega más interesante y ligada a las políticas públicas. Pero también debo decir que dentro de este servicio, el departamento de estudios donde trabajo es, en sí mismo, una muestra poco representativa.

La cosa es que trabajar para el Estado ya tiene algo extraño. De partida, como trabajador no estás regido por el código laboral. En otras palabras, el Estado puede tenerte a honorarios por años y no es ilegal. Por dar un ejemplo.
También está el tema de las "contratas", una especie de contrato a plazo fijo que dura un año, pero en el que pueden echarte cuando quieran. Por supuesto, no hay ningún tipo de indemnización. Más encima, aunque estés a honorarios, debes cumplir horarios y tu sueldo está publicado en Internet gracias a la ley de transparencia.
Y sin mediar ningún punto intermedio, están los funcionarios de planta. Estos están de por vida y a no ser de que se manden un condoro gigante, en el cuál les abren un sumario que puede encontrarlos culpables, no los pueden echar.

En el departamento en que trabajo sólo hay un funcionario de planta, un profesional bastante agradable y que hace un muy buen trabajo. Él es militante.
La jefa y la subjefa entraron ambas por la Alta Dirección Pública, lo que quiere decir que están por 3 años, prorrogables a otros 3, no importando quién sea presidente ni menos quién dirija el servicio.
Los demás somos un grupo de 4 profesionales que estamos a honorarios. Uno de ellos también es militante.
Y con todo esto de que pueda ganar Piñera es el más asustado.

Sucede que ronda un clima de incertidumbre, aunque sé por buena fuente que la cosa acá está harto más tranquila que en otros lugares más grandes y relevantes. Sé de gente en Mideplan (ministerio que Piñera ha amenazado con desarticular) que se ha ido, está buscando pega desde ya o amenazando con renunciar. Tengo un colega y amigo en el Ministerio del Interior que está tan seguro de que la derecha traerá sus propios técnicos para hacer su pega, que votó por Frei en primera vuelta.
Acá la cosa no es para tanto. De alguna manera nos segurizamos (aunque boletiemos) en que hacemos bien la pega, que nuestra jefa no es política, que estamos en un departamento técnico, que entramos por concurso y que no somos militantes. Excepto, claro, el compañero que les contaba. Cuando apareció una contrata, todos sabíamos que él tenía la prioridad. Aunque la contrata significara que iba a ganar un poco menos. Pero el miedo que ronda es que militar en la Concertación ameritará "desalojo" en un gobierno de la derecha.

Ahora, independiente de que yo no ande asustado, más de una vez me han preguntado si acaso trabajaría para un gobierno encabezado por Piñera. La verdad es que me gustaría saber cómo se pondría la cosa y decidirlo ahí. Los compromisos de pega se mantienen relativamente igual, no importando quién esté, aunque algunas cosas de mediano y corto plazo podría cambiar.
Como les digo, dependerá de como sea la cosa (si es que efectivamente gana Piñera) y si es que no nos sacan a todos. Total, tampoco tengo fidelidad con la Concertación.

Mucho he oído del uso de recursos públicos y de hacer propaganda al candidato oficialista. Jamás ha venido alguien a entregar panfletos o banderas, jamás se nos ha insinuado ir a una concentración o a hacer campaña; y los que sí militan, se juntan después de la pega para ir a cumplir con sus obligaciones políticas.

Tenemos, eso sí, al menos una conversa de política a la semana. Es raro que llegue a durar más de 15 minutos y no está programada ni mucho menos. Nace de las inquietudes y ganas de hablar de nostros mismos, auspiciadas por el conocimiento político que tiene nuestro militante de planta. Un conocimiento que nos hace ver ciertas señales que se nos pasan desapercibidas. Es bien entretenido en todo caso.

Acá la mayoría cree que Piñera será el próximo presidente, tal como las encuestas de hace meses confirman que es más la gente que cree que Piñera va a ganar que la que va a votar por él. Que yo sepa, aquí nadie vota por él. Y no es de extrañarse.
Cuesta encontrar gente de derecha que en vez de usar sus redes en el sector privado, quieran dedicarle tiempo a generar insumos de conocimiento para políticas públicas ganando menos plata.
La jefa está convencida que Piñera va a ganar y cree que esto se veía venir. Lo único que espera es que quien sea la persona que llegue a dirigir el servicio no tenga un espíritu censurador y/o pacato, y que deje trabajar.
En el tema que trabajamos acá, lamentablemente hay muchos prejuicios y la derecha jamás ha demostrado tener interés en cubrirlo o proponer políticas en torno a éste.

¿El ritmo de trabajo?

Más intenso que nunca. Fin de año implica cerrar una serie de temas. Ya hay gente que no continuará y la idea es dejar todo resuelto. A eso súmele que el director se va -pase lo que pase- en marzo. Esto significó en los últimos meses el realizar un trabajo gigantesco para algo que originalmente se entregaría a mediados del año próximo. Pero claro, el director quería mostrar algo antes de irse.

¿Influye la política en lo que hacemos?

En rigor, no. Nadie se mete mucho en lo que investigamos. Sin embargo el criterio político es el que decide qué hallazgos se le cuentan a la prensa y cuáles no.
También es cierto que opera una pequeña auto-censura y que hay temas que no tendrán el visto bueno para ser investigados si es que atentan de manera muy fuerte contra el status quo.
Mal que mal, esto es trabajar para el gobierno... pero no creo que exista un lugar (donde uno no sea el jefe) en que se pueda investigar y decir todo lo que uno quiera.

Honestamente, preferiría que la derecha no llegara al poder y que la pega se me ponga fome o que la pierda. Pero votar por Frei para cuidar la pega es algo que me avergonzaría.

Ya les dije que esto no es una muestra representativa.

Por Favor, reAcciones

P.S.: Esto no es una broma por el día de los inocentes

lunes, diciembre 21, 2009

Carta abierta a la maquinaria concertacionista


(Estimadas lectoras y estimados lectores:
si les hace sentido, sientan toda la libertad de hacer propia esta carta, agregar sus condiciones y enviarla o publicarla donde lo estimen conveniente.)


Estimados maquiavélicos (con todo el respeto que merece Maquiavelo y la incomodidad que me genera transformarlo en un adjetivo para ustedes):

Me tomo la libertad de escribirles y decir públicamente mis condiciones porque sé que necesitan mi voto.
No voté por ustedes en esta primera vuelta y en la presidencial del 2005 anulé en segunda vuelta.
Y ahora, con esa incertidumbre que genera el destino de los postmodernos votantes de ME-O, tienen que raspar todas las ollas.

Y tienen que convencer a gente como nosotros. Gente de izquierda y asqueada con la Concertación. Gente que no votará jamás por la derecha, es cierto, pero que no le tiembla tanto la mano para anular.
Porque, en el fondo, ustedes saben que los llamados a endosar votos no son recogidos de forma automática por todos los votantes. Y habemos quienes no somos militantes ni sentimos la obligación de obedecer ciegamente a nuestros ex-candidatos.

Y esto porque se han equivocado mucho en estas elecciones.

El primer gran error fue dejar que la DC ponga un candidato que ya fue presidente y que no tiene nada creíble para la izquierda (privatizó el agua, inundó a los pehuenches en Ralco, no recibió jamás a los familiares de víctimas de la dictadura, aumentó la desigualdad, se dejó pasar el gol con Pascua-Lama y trajo de vuelta a Pinochet). Además, es por sí mismo un candidato fome y poco atractivo.
Se entiende su elección la primera vez, básicamente se votó por su nombre, pero hoy no.

El segundo gran error fue que desde el PS las "alternativas" que amagaron a presentarse fueran Lagos e Insulza. El primero, teniendo a cuestas un gobierno aún más derechista que el de Frei y que quedó en deuda ambiental por todos lados. Por mucho que ahora se las de de ecologista anti calentamiento global. Más encima, con ese ego atropellador que imponía como condición el ser proclamado, negándose a competir dentro de la coalición.
El segundo, el famoso Pánzer y eterno ministro. Este otro no quería soltar una rama antes de agarrar la otra. Y de lo más cómodo en su puesto en la OEA, encontró que las encuestas no eran lo suficientemente sólidas como para dejar una pega tan bien pagada en Washington.
Pencas los dos.

El tercer gran error, también del PS, fue no encontrar la manera de canalizar legítimamente los deseos de Marquitos de ser presidente. Ahora tienen este engendro de un 20% impredecible que los hace tiritar.

El cuarto gran error fue que mientras el ganoso de Frei amenazaba con que tenía que haber primarias para decidir el candidato (en verdad para espantar las ganas de Lagos o Insulza), apareció Gómez del PRSD con ganas de irse a primarias y todo. Fue evidente que Frei no tenía como tragarse sus palabras e inventaron esas primarias truchas que se zanjaron en un par de regiones. Lo peor de todo, es que pese a todo el aparataje DC-PPD-PS, votó poca gente y el porcentaje que tuvo Gómez fue sorpresivamente alto. Si la hubieran hecho bien, no quedaría esa sensación de que pasaron máquina. Por lo demás, creo que Gómez era harto mejor candidato: es más joven (pero con experiencia), es de ideas progresistas y representaba una continuidad sin ser una cara repetida para la presidencia. Les apuesto que con Gómez Marquitos no llegaba ni al 7%.

El quinto error es realmente una suma de errores: hicieron una campaña penca, desgastada, que evidenció cansancio y con una serie de tiras y aflojas que demostraron que el comando es una bolsa de gatos y que los principales enemigos de Frei están en su misma campaña. Es impresionante la cantidad de condoros comunicacionales que se mandaron...

Mis condiciones

Al igual que ME-O me gustaría que se fueran todos los dirigentes matones y pencas de los partidos. No sólo los presidentes. Pero que se fueran de verdad, para la casa. Y que de pasadita empiecen a jubilar a todos los chantas de los operadores políticos.

Que se transparenten todos los conflictos de intereses y que se acabe la verdadera "puerta giratoria": esa que permite que después de ser ministro termines en directorios de empresas directamente ligadas con el cargo de gobierno que desempeñaste. Eso es un lobby descarado y uso de información y contactos privilegiados.

Renovación total de los políticos. Que dejen entrar a la generación post dictadura, los que tienen menos de cuarenta y en general todo quien quiera trabajar de manera honesta, aunque no milite.
De hecho, basta de cuoteos y de esa obligación de militar para ocupar ciertos cargos.

Ampliar los canales de participación ciudadana. No más ridiculeces como lo que empezó con el movimiento de secundarios y culminó en la LGE (y con los secundarios retirándose de la mesa).

Por último, busquen las fórmulas legales para llamar a una asamblea constituyente donde podamos los ciudadanos dar nuestra opinión sobre la Constitución, donde se incluya la nacionalización del agua, el compromiso con las energías limpias y la reducción de emisiones, la autonomía regional y el fin al sistema binominal. Además debe hacerse un reconocimiento serio a los pueblos originarios y la gran estafa de la que han sido víctimas a lo largo de la historia, pasando por como quedamos al debe en nuestro informe de DD.HH. ante la ONU, un condoro de la era Bachelet que ha pasado piola y que han tenido que arreglar a la rápida.

Y casi se me olvidaba: deben limitar las reelecciones de parlamentarios y alcaldes. Ley pareja para todos los cargos de elección popular. Y esto se los digo porque el proyecto que hubo este año fue rechazado gracias a votos y abstenciones concertacionistas.

Y que les quede claro que esto no significa apoyar esos 4 años de gobierno de Frei, sino que estar exigiendo el cumplimiento de esas promesas. Acuérdense que para las próximas elecciones habrá voto voluntario y se les acabarán sus especulaciones con el padrón electoral.

¿Muy difícil?

Difícil que vote por Frei entonces...

Por Favor, reAcciones

P.S.: No TODOS los votantes de ME-O son postmodernos, pero sí hay los suficientes como para no tener certeza por quién van a votar en segunda vuelta.

martes, diciembre 15, 2009

El gesto de la semana: "El mejor argumento contra la democracia...

Marcelita Sabat, nueva diputada por Providencia y Ñuñoa

...es conversar 5 minutos con el votante promedio", decía Churchill.

Mi padre me preguntaba cuáles habían sido mis alegrías y tristezas después de los resultados del domingo y creo que mi principal tristeza (o vergüenza, más bien) está en el distrito donde voto.

Como siempre, el candidato a diputado por el que voté no salió y sacó un porcentaje similar al de mi candidato presidencial (que tampoco pasó a segunda vuelta).
Era relativamente esperable. El sistema binominal da pocas sorpresas y permite aberraciones como la elección de Fulvio Rossi o de Pepe Auth en desmedro de Urrutia y Escobar, respectivamente.
La cosa es que la competencia está dentro de las listas, por lo que la pregunta se reduce a quién será el concertacionista y quién será el aliancista.

De parte de la Concertación se reeligió Burgos, con quién tengo razones directas para lamentar su reelección.
De parte de la alianza había un par de candidatos que, como decía una periodista del 13, representaban polos opuestos: Rodrigo Álvarez, presidente de la cámara de diputados, uno de los mejores evaluados y, personalmente, de los pocos UDI que me merecen respeto y confianza. Un abogado de la PUC (era que no) con master en Harvard y doctorado en Navarra (era que no). Para quienes lo han tenido de profesor, sólo buenos comentarios.
Del lado de RN, en cambio, Marcela Sabat. Hija del truculento alcalde de Ñuñoa. Egresada de Derecho de la Finis Terrae, modelo, promotora, vendedora, secretaria y relacionadora pública. Pueden ver su sólido currículum aquí.
Por supuesto que no hay nada de indigno en ninguna de estas ocupaciones, pero da para preguntarse si es esa la experiencia idónea para una legisladora.

En cualquier caso, los CV pueden ser engañosos. Hay gente que miente u omite en ellos.
Pero no sólo eso.
Un currículum no representa ni las ideas ni las capacidades de una persona.
Por eso hice el esfuerzo por ver si encontraba algo que desmintiera mis prejuicios.

Llegué a esta entrevista. La lectura me dejó bastante perplejo, pero me dije "es LUN, cualquier cosa que aparezca es farandulera. No necesariamente ella es TAN así".
Decidí darle otra oportunidad, auspiciada por mi ingenua e infundamentada fe en -deseo, más bien- que la gente que llega al parlamento tiene una determinada preparación que garantiza buenos legisladores. Aceptables al menos...
Entonces llegué a esta página donde hay unos videos de su desempeño en un debate televisivo con sus oponentes.

En su página web es imposible encontrar alguna propuesta concreta, proyectos de ley o su posición frente a temas a legislar.
Nada.
Eso sí, hay varias fotos y algunos videos de sus apariciones en televisión (aunque por cierto no están los videos del debate que les mencionaba más arriba).

La cosa es que, como ya sabrán, la hija del alcalde ganó generando un lamento transversal en el mundo político por la pérdida de Álvarez.

Las críticas le han dado duro desde hace varios meses, ella alude eso al machismo. No me extraña que confunda la crítica al pituto, al nepotismo, a la mediocridad, a la banalidad y a la estupidez con machismo. Mal que mal, mientras modelaba (hacía campaña) en la feria dijo que no habían mujeres en el parlamento.
Hoy LUN la tiene en portada. "Son prejuicios" dice ella.
Para mi gusto hay fundamento suficiente.

Con todo, me parece que la gran perdedora es la democracia misma. Por mucho de que nos hablen de que fue una elección ejemplar y una "fiesta de la democracia", creo que el sistema democrático se desacredita cada vez que un representante es elegido por su imagen y no por sus ideas.
Por su apellido (y la maquinaria de su padre) y no por sus aptitudes.
Por que es agraciado/a y no por sus posiciones político-valóricas.

Si un par de bailes y besos bastan para delegarle el poder para legislar y fiscalizar, el mejor argumento contra la democracia está en la calidad de sus representantes y en el criterio de muchos electores.

Alguien podría decir que es parte de la democracia que haya representación. Incluso de las rubias tontas.
Si eso es democracia, prefiero la aristocracia en su etimología: el gobierno de los mejores.

Si indigna cuando no es la excelencia el criterio que prima en todo aquél que trabaje en el Estado, ¿Por qué no exigir lo mismo a los parlamentarios?

Pero la verdad de las cosas, de lo único que me convenzo cada vez más, es que no necesitamos el parlamento.

Por Favor, reAcciones

P.S.: Marcela Sabat será ahora una de las cuatro voceras de Piñera en su búsqueda del voto femenino y de hacer contrapeso a la Tohá en la campaña de Frei. Mala jugada la del especulador.

P.D. al 17 de Diciembre: Parece que no estaba muy equivocado. Ya se están arrepintiendo de su rol como vocera. Pueden oírla directamente aquí.

miércoles, diciembre 09, 2009

El gesto de la semana: Sentido del humor


Bastante más de lo que uno piensa se ha estudiado el humor.
Y bastante en serio.
Y hace bastante rato.
Aristóteles se considera de los primeros en destinar tiempo de ocio (auspiciado por la esclavitud) al estudio de la risa. Y Bergson -dentro de los "contemporáneos"- tiene en "La Risa" uno de los estudios más interesantes en torno al fenómeno.

Dentro de las ideas que él plantea podemos mencionar:
  • Fuera de lo que es propiamente humano, no hay nada cómico. Lo que él mismo reconoce como una actualización de definir al ser humano como "un animal que ríe" (las hienas no se ríen realmente, aunque sus chillidos se asemejan)
  • La insensibilidad acompaña a la risa. Su medio natural es la indiferencia. No nos reímos de lo que nos importa. Para reírse de algo hay que "suspender" toda empatía y tomar una distancia. Hace poco más de 3 años hablamos de esto acá. Pero supongo que se entiende cuando uno piensa en lo fácil que es reírse de una caída de alguien que no conocemos y lo difícil que es reírse cuando es nuestra abuelita.
  • Toda "rigidez" del carácter, toda "rigidez" del espíritu y aún del cuerpo será, pues, sospechosa para la sociedad, porque puede ser el indicio de una actividad que se adormece y de una actividad que se aisla, apartándose del centro común, en torno del cual gravita la sociedad entera.
  • Esta rigidez constituye lo cómico y la risa su castigo. En otras palabras, el humor gira en torno a la rigidez y la risa aparece cuando esta rigidez "falla". Cuando los cálculos no funcionan. El ejemplo clásico es el quitar la silla cuando alguien va a sentarse.
Hasta aquí con el maestro Bergson.
Evidentemente hay mucho más, pero confío que quienes se interesen encontarán la manera de aplacar esa curiosidad.
A todo esto le agregaría otro elemento en torno al humor, que por cierto no es novedoso: lo cómico tiene un correlato directo con la realidad.
Aquello que nos causa gracia tiende a ser una representación fallida o exagerada de la realidad. Es por eso que nos puede llegar a causar gracia que una persona se parezca a otra que conocemos.
Es la razón por la que South Park o Los Simpson son series tan exitosas: en la mayoría de sus capítulos hay referencias a eventos reales o películas, los cuales se re-presentan de forma exagerada o "fallida".
Y probablemente el éxito de Coco Legrand pasa por esa capacidad de captar una cierta idiosincracia, una identidad, en la cual es posible verse reflejado. Es lo que le llaman -pese a que muchos colegas les moleste- la "sensibilidad sociológica" del Coco Legrand.

En el punto más alto de la pirámide de este argumento están los imitadores.
Un buen imitador es capaz de hacer una caricatura de quien imita exagerando algunos de sus rasgos, timbres, muletillas, gestos y entonaciones.
Y la clave es esa: siempre es una exageración.
Y por otro lado, siempre es una imitación. Vale decir, una representación "fallida" de lo real.

Ahora, el hecho de que el imitador "tergiverse" lo real aporta un elemento central: siempre hay una crítica velada al imitado. Sus defectos adquieren protagonismo y se recubren de esa risa que castiga aquello que no planificamos. Que no queremos.
Es por eso que la fantasía, la ciencia ficción, no nos causa gracia. Pero una parodia de la "Guerra de las galaxias" sí lo hace.

Escribo todo esto, a 4 días de las elecciones de primera vuelta, no tanto para reflexionar en torno al sentido del humor (por mucho que estas elecciones y sus campañas nos parezcan de payasos), sino para intentar una interpretación sobre qué es lo que significa su carencia...

El programa "Animal Nocturno" fue otro de los bastiones de la "farandulización" de las elecciones. Un proceso que, por supuesto, nuestros productores han imitado de EE.UU.
Kramer, personaje permanente del mencionado programa, es un número fijo y probablemente uno de los mayores ganchos para verlo.

Sin embargo en las últimas semanas ni Frei ni Piñera aceptaron ser imitados por Kramer.

¿Hay alguna realidad caricaturizada que no quieren que se represente?

¿Cuál es la rigidez en juego que no quiere castigarse con la risa?

¿Será que no quieren que nos insensibilicemos (aún más) frente a sus figuras?

Lo curioso es que tanto ME-O como Arrate sí se dejaron imitar (y con bastante humor) por Kramer.

¿Tendrán "mucho que perder", o mejor dicho, mucho que ocultar, los candidatos con más opciones de pasar a segunda vuelta?

A lo mejor el mismo Kramer tiene la respuesta de por qué Piñera no quiere ser imitado.

Y Frei (con ME-O)

Por Favor, reAcciones

P.S.: Les dejo también la hilarante imitación de Arrate.

miércoles, diciembre 02, 2009

Invitación/Celebración

Haga click para ver en gigante

Interrumpimos su programación habitual para hacer un importante anuncio:
Les conté hace un tiempo todo lo que sucedió con la termoeléctrica ilegal que AES Gener pretendía instalar en la saturadísima (de todo tipo de contaminación) zona de Las Ventanas.

Quienes no estén al tanto, pueden leerlo aquí.

Afortunadamente el alcalde ya emitió el decreto que ordena la demolición, así que estamos a la espera de que desarmen lo que nunca debieron haber armado. En todo caso, al construirla y pronto cuando haya que destruirla, ya habrá dado más trabajo del que pensaba dar. Así que si es por el desempleo, todo bien.

Bueno, la cosa es que bastante hemos rabiado con el tema y por fin llegó la hora de celebrar.

Este domingo, en el paseo de Ventanas, se celebrará -desde las 4 de la tarde y hasta que se ponga el sol- la histórica conquista judicial llevada a cabo por el consejo ecológico de Puchuncaví-Quintero.
El evento es totalmente gratuito y contará con la colaboración y presencia de Juanafé, Villa Cariño, Banda Ancha, Sedimento, Fósil, Rezaka del Norte, Sonora mayor, Lucho Le Bert y el vocalista de Difuntos Correa.

Para llegar, puede tomar un bus a Quintero y luego la micro a Ventanas que lo dejará en el lugar mismo del evento.
La otra opción es tomarse el bus directo Quintero-Ventanas. Tengo entendido que Cóndor Bus hace el viaje.

Mapa semi-impresionista del lugar. Haga click para agrandar

Nos vemos allá

P.S.: La próxima semana regresaremos a la programación de siempre.

jueves, noviembre 26, 2009

Votar por Piñera y el sentido común Vol.2


Dado el poco tiempo que queda antes de las elecciones, continuaré con esta sección antes de que se haga obsoleta.

(sin)razón 3: "Él ha sido un empresario exitoso, sabrá muy bien como administrar el país y hacerlo crecer"

Tal vez uno de los elementos más repetitivos de su hostigante y maqueteada campaña sea el famoso "vamos a crear un millón de nuevos empleos". Lo curioso es que esta impresionante cifra (que jamás aclara el tipo de empleos que se crearán) tiene un supuesto no menos impresionante: un crecimiento sostenido del 6%. La OCDE pronostica que Chile crecerá un 4,1% en el 2010 y, fuera de cámaras, el equipo económico de Piñera tiene muy claro que esta ya es una promesa que no se podrá cumplir. Pero las campañas -ya lo sabemos- poco tienen que ver con la verdad y mucho con la propaganda, la mentira y la promesa vacía. El "ofertón" como le gusta decir a algunos.
La cosa es que la entonación de dicha muletilla de campaña no es menor. Ese "vamos", hace ver que la creación de empleos es algo que está en manos de quien encabece el gobierno y no de las PYMES y Empresas que concentran la empleabilidad en este país. Es cierto, las políticas fiscales y laborales pueden facilitar o dificultar las condiciones para que privados contraten mano de obra -donde lamentablemente la precarización de las condiciones parece ser la condición exigida para disminuir el desempleo-, pero en ningún caso el sujeto activo en la baja del desempleo es el Estado.
Pero suena bien. En boca de un tipo que "le da" trabajo a tanta gente, aparece como creíble que él sea el que le va a dar un millón de empleos a los cesantes de este país.
Piñera sabe esto y lo explota. De algún modo ha logrado instalar en el sentido común de muchos votantes desideologizados/desinformados que su éxito en el mundo privado es traducible y extensible a todo el país.
Si extremamos el recurso, sería como decir que tener un millonario en el gobierno aumenta la probabilidad de que este país nos haga millonarios a todos.
Más todavía si insiste en la idea de que él proviene de una familia de clase "media".
¿Qué mejor foto para la clase media aspiracional que ver uno de los "suyos" transformándose en uno de los más ricos de Chile y premiarlo por eso con el más alto cargo político?
Parece diluirse esa sabiduría popular que indica que "nadie se hace rico de manera honesta en una generación".

Sabido es que Piñera no es querido en el gremio empresarial. Más allá de sus arranques en el Banco de Talca, recuerdo que siempre me interesó saber porqué Ricardo Claro lo había echado al agua en un programa de televisión con la famosa radio Kyoto (en un patrón que al parecer se repite). Y las malas lenguas dicen que mientras Piñera era un incipiente Ingeniero Comercial, Claro lo envió a estudiar la viabilidad de instalar el sistema de las tarjetas de crédito en Chile. Piñera anduvo de gira un buen rato y concluyó que en Chile no era el momento. Quedándose, de pasada, con todos los contactos y estudios correspondientes. Un año después funda "Bancard" y trae el sistema de endeudamiento plástico arrancándose con los tarros.
Y eso dejó picado a Claro por varios años hasta su venganza.
Y de pasada, le generó una pésima fama entre el gremio.

Lo cierto es que Piñera, en rigor, no es un empresario.
Mucho menos un "emprendedor".
Es más apropiado referirse a Piñera como un financista o como un especulador (vale decir, alguien hábil en decidir dónde meter la plata), que como un personaje que ha montado una industria y se ha relacionado con sus subalternos. Fuentes del empresariado aclaran que nunca ha formado parte de sus gremios (Sofofa o CPC) y que no es considerado como "de nuestro mundo", sino más bien "de los asuntos especulativos".

De hecho, son elocuentes algunas de las historias que circulan en torno a su carácter como "jefazo". Entre las azafatas de LAN que te toque atender a Piñera es motivo de desagrado e incluso miedo, nada de orgullo. No sólo porque se dice que es descortés y ni siquiera mira (mucho menos contesta) cuando lo saludan, sino porque son conocidas sus historias de mal carácter como cuando Gina Ampuero pasó a llevar su pie que estaba extendido en el pasillo. Piñera le habría dicho ¿Tú quieres pisarme? ¡Yo te voy a enseñar como se pisa!
Gina quedó con dos falanges fracturadas y un mes de licencia. Luego del incidente, el jefe directo se ensañó con Gina pesándola antes de cada viaje. Gina terminó sucidándose.

En otra ocasión, una demora por motivos técnicos hizo que el candidato fuera a la cabina del piloto a gritarle ¡Despega huevón!
El piloto lo expulsó de la cabina, pero tuvo que ir a dar explicaciones del hecho a la jefatura de la empresa.
A eso súmele las quejas por hostigamiento a los sindicatos y malas condiciones laborales.

Pero la verdad de las cosas es que poco tiene que ver Piñera mismo con esas políticas. Él es sólo uno de los dueños. Uno de los dueños que "deja pasar" -como cuando despidieron una embarazada de Chilevisión- y permite que en sus empresas los abusos ocurran.
Del mismo modo en que LanCargo pagó su multa asumiendo una colusión, el pagó otra por la compra de acciones luego de una reunión de directorio. Compra que le reportó varios millones por esa "pasada".
Piñera se defiende diciendo que el sistema de compra estaba "automatizado", que él realmente no dio una orden después de estar en una reunión donde se conocieron los resultados de la compañía.

Yo le creo.
Yo creo que en sus negocios el está poco (o nada) involucrado de forma directa y presencial. Tiene gente encargada que le cuida las finanzas y sistemas de movimiento de capitales para hacerlos rendir. Le creo que tampoco tuvo nada que ver con la colusión de las farmacias, donde su reacción fue deshacerse de las acciones de Farmacias Ahumada que tenía.

Le creo porque eso es lo que hace. Mueve con oportunismo sus platas hacia donde le puedan rendir.
Tal vez Chilevisión puede ser una excepción, dado el carácter estratégico de poseer un canal de televisión. Lo mismo con Colo-Colo, que lo acerca al mundo "popular" y replica el modelo Macri-Berlusconi.

Pero más allá de eso no pasa. No tiene que lidiar con las dificultades de formar una empresa ni con el "problema" de los trabajadores.
Por eso me parece un descaro que se plantee como emprendedor, e incluso como alguien que comprende a los trabajadores.
Las experiencias que se conocen, de quienes trabajan en sus empresas y han tenido que lidiar con él, debiera hacer temer por ese millón de nuevos empleos.

Valga entonces esa aclaración que le tiró ME-O: "un millón de empleos no es un millón de esclavos".

¿Cuál será el costo de ese crecimiento y esos empleos prometidos?

Piñera no se enterará. Nunca lo ha hecho.

Por Favor, reAcciones

miércoles, noviembre 18, 2009

El gesto de la semana: "Cuando los debates convencen"


Si no me equivoco, fue para las celebraciones de este 18 de septiembre que estuve compartiendo en la playa con un amigo "de las pichangas" que además ahora está de jefe de prensa de la campaña de ME-O. Aproveché de preguntarle cómo iba la cosa (me dijo que no había mucho presupuesto y que ahora tenía que echar a uno de los periodistas, siendo que lo que él necesitaba era contratar más gente), cómo era trabajar con el candidato (básicamente me dijo que era un hiperactivo que no paraba nunca) y quién había refrescado -justo en fiestas patrias- esa entrevista con declaraciones "antipatriotas" de ME-O (me dijo lo que ya todos saben, que fue la hija de Piñera por Twitter).
En esos tiempos no tenía mi voto decidido y el "voto-útil-anti-concertación-que-reestructure-el-panorama-político" me era todavía bastante tentador. De hecho cuando me despedí de él creo que le dije: "Voy a votar por ME-O. Voy a ser otro joven urbano ABC1 más que lo hará."

Pero esto fue antes de los debates. Y si bien parece ser cierto que los debates no convencen a mucha gente de cambiar (o aclarar) su voto, debo decir que yo sí fui uno de los públicos objetivos. Sobre todo el primero, donde decidí mi voto y el último donde confirmé mi desencanto con Marquitos.

El primer debate estuvo marcado por la indiscutible irrupción de Arrate. Su discurso, soltura y solidez me volvió a recordar que con el voto se debe ser honesto. Que para instrumentalizar están las encuestas y que sólo por joder, yo también me declararía indeciso si me encuestaran (como el 20% de mentiroso/as que lo hacen).
Oir las ideas de Arrate me recordó (del latín re y cordis: "volver a pasar por el corazón") que votar se trata de apoyar aquél que mejor represente las ideas que uno tiene. Por muy mentirosa que sea la democracia representativa.

No recuerdo si fue en ese mismo debate o en el radial o en algún programa por esa misma fecha, pero hubo en el discurso de ME-O un elemento que me molestó por lo conveniente, hipócrita y evidentemente propagandista: en un momento se refirió que un determinado defecto (no recuerdo si era el conservadurismo o la cantidad de años en el circo) lo compartían tanto la derecha como la izquierda.
A priori, no tengo nada que negar. Sin duda hay varios defectos compartidos en ambas facciones. Lo que me molestó fue que por "izquierda" se refería a la Concertación. Creo que sólo para un derechista extremo o para alguien muy desesperado por desmarcarse de la estructura política, es sostenible considerar a la Concertación como "izquierda".
Me parece evidente que la sola presencia de la DC en la coalición, sumada a la negativa originaria de incluir a la izquierda "de verdad" (el actual pacto electoral no es un pacto político) debieran ser suficientes para no confundirse. Será una izquierda sin representación parlamentaria, que no llega al 10% nacional, pero nada que ver con la Concertación. Un poco de respeto.

Pero la confirmación final de mi malestar con ME-O fue el último debate de Anatel. En particular su "discurso de cierre". En éste se mandó prematuramente la frase: "Votar por Arrate es votar por Frei y votar por Frei es votar por Piñera".
A primera vista, esta frase tiene poco sentido y suena a un complejo malabarismo donde todos los demás candidatos son lo mismo y él es la única alternativa.
En una segunda reflexión -no muy sofisticada, por cierto- aparece que darle el voto a Arrate (en primera vuelta) y no dárselo a ME-O es facilitar que sea Frei quien pase a segunda vuelta (he ahí el "es votar por Frei"). Y como Frei es menos competitivo (según la CEP) que ME-O en segunda vuelta, va a ganar Piñera (he ahí el "es votar por Piñera").
Estoy lejos de querer ofender su intelecto, estimada lectora y estimado lector, al hacer lo obvio explícito, simplemente me interesaba evidenciar todo el cálculo instrumental que hay detrás de esa frase. Una frase que no deja de ser un "vota por mí para que no gane Piñera".

Es todo lo que me faltaba por escuchar. Ese discurso de los "sueños", la "juventud", "el futuro" y el "cambio", transmutado en el viejo chantaje político, el pragmatismo y la campaña del miedo. Prácticas propias de esos mismos dirigentes que tienen secuestrada la Concertación, como a él tanto le gusta denunciar.

Punto aparte el hecho de que Arrate con todas sus letras propuso un "acuerdo mínimo" a Frei y ME-O para derrotar a la derecha en segunda vuelta. Acuerdo sobre el que ninguno de los dos se pronunció. Ni siquiera Marcos "no votar por mí es votar por Piñera" Enríquez-Ominami.

Es curioso, pero tanto el primer como el último debate me hicieron conciente del sentido del voto, alejándome de ese odioso pragmatismo. El primero, gracias a Arrate. El segundo, a Marquitos.

Por Favor, reAcciones

P.S.: les recomiendo esta inspiradora carta abierta escrita por el ilustre Citizen Almeida.

jueves, noviembre 12, 2009

El Rock&Roll del momento: Ted Kaczynski, el Unabomber

Theodore John Kaczynski

Debo partir por agradecer la animada participación que los estimados y estimadas comentaristas dejaron en el concurso de la columna pasada.
En todo caso, no sé si la palabra "concurso" sea la apropiada, ya que no hubo un proceso de licitación transparente, las bases no estaban claras y jamás se habló de premios. La idea era que participaran nomás y que pudieran fantasear con la posibilidad, reapropiándonos -de pasada- de aquello que le llaman "terrorismo" y que sirve de excusa para los abusos de los Estados en prácticamente todos los países. No somos la excepción, y la aplicación de la "ley antiterrorista" en la Araucanía da fe de ello. ¿Cómo puede ser considerada válida la declaración de un testigo anónimo?

Agradezco también a quienes se lo tomaron a pecho y nos brindaron -justo esos días- la dulce coincidencia de poner bombas en TVN, Inacap, UCSH, BancoEstado de Concepción, Banco de Chile de Providencia, la 52ª Comisaría de Rinconada de Maipú, Municipio de Cerro Navia, Ministerio de Hacienda y Banco Itaú de Apoquindo. Aunque todas estas eran falsas, la intención es lo que vale.
Y mención aparte para quienes pusieron bombas reales en el Banco BCI del Hotel Marriott y BancoEstado de Recoleta. Como bien parafraseaba MEFISTO en los comentarios, la realidad supera a la ficción.

Pero en esto de las bombas "con contenido", es necesario rendir un tributo contemporáneo, a modo de cierre. Y agradezco a "La poderosa muerte" por haber recordado al personaje en cuestión en los comentarios de la columna antepasada.

Ted Kaczynski es un hombre que se lo tomó muy en serio en su momento. Nada menos que durante 18 años...
Este hijo de polaco-estadounidenses nacido en 1942 tenía todo el perfil para haberse trasformado en uno de los mátemáticos más importantes de nuestro tiempo: graduado en Harvard y doctorado en matemáticas por la Universidad de Michigan (su tesis fue premiada como la mejor del año en la universidad), ya a los 25 años oficiaba de profesor asistente en la Universidad de California, Berkeley. Cargo que dejó dos años más tarde. Se mudó a una pequeña casa de sus padres en Illinois, para luego de dos años retirarse a sobrevivir en una cabaña en Montana sin luz ni agua que él mismo había construido, cazando y recolectando para comer.
En mayo de 1978 envió su primera carta bomba a Buckely Crist, profesor de ingeniería en materiales de la Universidad de Northwestern. Crist dudó y llamó a la policía. La bomba le estalló al policía que la abrió dañándole la mano, pero nada grave. Esta primera bomba era algo precaria y resultó más bien fallida.

Al año siguiente otro envío postal hiere a un estudiante en la misma universidad y meses más tarde un paquete postal estalla dentro de un avion de United Airlines. El avión no explotó, pero tuvo que aterrizar de emergencia porque salió mucho humo y hubo gente con principios de asfixia.

Después de esto, se transformó en un asunto federal y el FBI pasó a llamar el caso "Unabomb" (una sigla de "bomba en universidad y aerolíneas").

En junio de 1980, Percy Wood presidente de United Airlines es herido por un envío postal. Posteriormente, entre 1981 y 1982 tres nuevos ataques dejan dos heridos en la Universidad de Vanderbilt y en la de Berkeley.

En 1985 se producen cuatro atentados: un paquete bomba estalla en el departamento de computación de la Universidad de Berkeley, otro alcanza a ser desactivado en las oficinas de la Boeing Corporation en Washington, un docente es herido en la Universidad de Michigan y en una tienda de computadores en California muere un vendedor que inspeccionó un extraño paquete dejado en las inmediaciones. La primera víctima del "Unabomber", como lo comenzó a llamar la prensa.

Dos años más tarde, en 1987 se repite el modus operandi, pero sin resultado fatal: es herido un vendedor de una tienda de computadores en Salt Lake City.

Seis años después, un nuevo atentado explosivo postal atribuido al Unabomber hiere al genetista Charles Epstein de la Universidad de California. Horas más tarde es herido por otro paquete explosivo David Gelertner, especialista en computación.

¿Se va adivinando cuál es su público objetivo?

En 1994 ocurre la segunda muerte. En San Francisco Thomas Mosser, vicepresidente y director general de una empresa de publicidad es victima de otro atentado postal.

Finalmente, en 1995 comete su último atentado fatal: el presidente de la Asociación Forestal de California Gilbert P. Murray, muere al abrir un envío postal explosivo de Kaczynski.

En Septiembre de ese año Kaczynski escribe al New York Times y al Washington Post una carta donde promete terminar con los atentados a condición de que se publique lo que se llamó su manifiesto. Un texto de unas 35.000 palabras titulado "La sociedad industrial y su futuro".

Reproduzco a continuación el párrafo inicial:

La Revolución Industrial y sus consecuencias han sido un desastre para la raza humana. Ha aumentado enormemente la expectativa de vida de aquellos de nosotros que vivimos en paises «avanzados», pero ha desestabilizado la sociedad, ha hecho la vida imposible, ha sometido a los seres humanos a indignidades, ha conducido a extender el sufrimiento psicológico (en el tercer mundo también el sufrimiento físico) y ha infligido un daño severo en el mundo natural. El continuo desarrollo de la tecnología empeorará la situación. Ciertamente someterá a los seres humanos a grandes indignidades e infligirá gran daño en el mundo natural, probablemente conducirá a un gran colapso social y al sufrimiento psicológico, y puede que conduzca al incremento del sufrimiento físico incluso en paises «avanzados»

Puede leer el texto completo aquí. Se los recomiendo para cuando tengan tiempo, no deja títere con cabeza.

Pese a que fue una decisión polémica, el FBI accedió a que se publicara el manifiesto, ya que podía ayudar a que alguien lo reconociera. Hasta el momento habían elaborado 4 perfiles distintos y no había ninguna pista clave.

Y así fue.
Año y medio más tarde, después de darle muchas vueltas al asunto, su hermano David decide dirigirse al FBI. Había reconocido en Ted muchas de las ideas del manifiesto, pero hubo una expresión que le era muy familiar, porque la utilizaba su padre: "no puedes comerte el pastel y al mismo tiempo tenerlo".

Con eso el cerco comenzó a cerrarse, hasta que fue detenido en su solitaria cabaña y dos años más tarde, condenado a la cadena perpetua que cumple actualmente por declararse culpable de los atentados que asesinaron a 3 personas y dejaron a 23 heridas. El testimonio de su hermano fue vital para salvarlo de la pena de muerte. Ahí argumentó que Ted tenía desórdenes mentales desde pequeño.

De su niñez se sabe que su coeficiente intelectual de 167 motivó que lo pasaran directamente de 5º a 7º grado cuando era niño y las matemáticas que le resultaban demasiado fáciles hicieron que nuevamente lo adelantaran de curso, terminando su enseñanza escolar 2 años antes. Sin embargo, nunca pudo adaptarse a sus compañeros de mayor edad, quienes lo molestaban y excluían de los juegos. No dejó de ser el niño raro-genio-nerd-aislado que está condenado a pasarlo mal, sobre todo en la cuna del matonaje escolar.

Mientras estuvo en Harvard (donde entró a los 16 años) participó en estudios de personalidad del doctor Henry Murray, los que en realidad eran subvencionados por el macabro MK Ultra (proyecto de la CIA iniciado en 1953, destinado al control mental). Las situaciones estresantes a las que fue sometido Ted serían la explicación de su aversión a toda forma de control. Sobre todo el mental y el hecho de que la tecnología e investigación universitaria se pusiera a su servicio.

Dejando fuera -por un minuto- el que haya muerto gente y otros resultado heridos, es impresionante el grado de lucidez que hay en su discurso.

¿Son sus actos la consecuencia comprometida de un diagnóstico así?

Desde el punto de vista de esta sección: Rock sin compromisos ni miramientos.

Por Favor, reAcciones

martes, noviembre 03, 2009

Y usted, ¿dónde la pondría? II (¿Y a quién echaría a la hoguera?)

Un retrato de Guy Fawkes, un terrorista con festividad incluida

Ya que en varias partes de nuestro país se ha naturalizado -vergüenza ajena que sentimos varios, gran negocio para quienes venden dulces con motivos de calabazas y monstruos- celebrar "Halloween", propongo importar otra festividad extranjera que también llama a la creatividad y de pasada hace reflexionar un poco sobre la política (y los políticos).

Esta festividad tiene lugar los 5 de noviembre y se le llama "Guy Fawkes" (en honor al hombre que pretendía hacer volar el parlamento inglés en lo que se llamó "el complot de la pólvora") o "Bonfire night" (noche de la hoguera).

Hace poco más de 3 años, publicaba aquí el primer llamado a concurso en este blog. La idea era que inspirados en la figura de Guy Fawkes (y su atentado que pretendía llamar la atención de los intolerantes religiosos) los estimados lectores y las estimadas lectoras pudieran dar rienda suelta al pequeño terrorista que todos -algunos más reprimidos que otros- llevamos dentro y declararan en dónde les gustaría poner una bomba.

Ahora, como replicar el concurso tal cual es una falta de creatividad demasiado grosera, añadiremos una innovación: tal como los ingleses han cambiado con el tiempo el muñeco de Guy Fawkes por otras personalidades (como el papa, Margaret Thatcher e incluso Tony Blair) a las que echan a la hoguera, la estimada lectora y el estimado lector podrán elegir su personaje a ser quemado.

Evidentemente el espíritu de este concurso es absolutamente lúdico y si le da algo de cargo de conciencia reivindicar actitudes violentas, puede imaginar que el lugar donde pondría su bomba estará absolutamente vacío y que la personalidad que echaría a la hoguera es sólo un muñeco.

Si aún así los resquemores le vienen de sólo imaginarlo, me temo que este blog jamás será de su gusto.

Resumiendo:

¿Usted dónde pondría la bomba y qué muñeco/a echaría a la hoguera?

Como repetir los orígenes de esta festividad sería un abuso para quienes ya lo leyeron en su momento, no me queda más que recomendarles este artículo en castellano dedicado al tema.

Si usted puede leer en inglés, he aquí un sitio completísimo.

Por Favor, sus objetivos.

P.S.: Es muy probable que usted lea esto pasado el 5 de noviembre, si es así no se abstenga de participar. Este concurso estará abierto toda la semana.

lunes, octubre 26, 2009

El gesto de la semana: Hablar del clima

Faltó haber salido con un vasito...

Por alguna razón está muy incorporado que el relleno oficial cuando no se tiene nada de que hablar es comentar el clima. El tiempo en realidad, si nos ponemos rigurosos con los conceptos...

La cosa es que muchas veces nos vemos envueltos en situaciones donde la proximidad con una persona pasa a ser incómoda. Principalmente porque no tenemos la confianza. Puede ser un vecino en el ascensor, un taxista, gente con la que tienes que lidiar en el trabajo, nocheros, recién conocidos, o el conocido del amigo que te dio un aventón.
Esos silencios generan presiones insostenibles para la mayoría y hablar del tiempo se transformaba en el comodín ideal: jamás será un tema polémico, es difícil encontrar percepciones muy opuestas (alguien que crea que una máxima de 9 grados es calurosa), no hay valores, ni credos religiosos o políticos involucrados.
Era la salida ideal para no tener que mirar el suelo, el piso o cómo cambiaban los números en el ascensor.

Era...

No sé ustedes, pero por lo menos desde este año, las conversaciones sobre el clima dejaron de ser triviales.
Han ido mutando hacia tonos más preocupantes. Al menos de perplejidad.

Y las señales no son pocas.
Lluvias que nos sorprenden porque nadie las había pronosticado. Granizadas y lluvias intensas pero breves en medio de Octubre -antes y después de días soleados y calurosos-. Tormentas breves pero con temperaturas cálidas..."Parecemos un país tropical" me ha tocado oír varias veces últimamente.
Uno podría echarle la culpa a la meteorología. Sabemos que no es una ciencia exacta y el dicho pedestre es que "nunca le achuntan" está arraigado, sin embargo es innegable que la tecnología ha mejorado y la cantidad de satélites ha aumentado. Aún así, el tiempo sigue sorprendiendo. Y parece que más que antes.
No lluve en los meses que siempre ha llovido y llueve más en los que usualmente llueve mucho menos. En otros países los veranos son azotados por oleadas de calor con sus incendios, mientras que en otros (y a veces los mismos), las lluvias inundan todo sumergiendo ciudades enteras.
Esto va más allá del fenómeno de "El Niño".

Quienes conocen las plantas y árboles también se dan cuenta: árboles floreciendo en pleno invierno y otros que pasan el año sin hacerlo, como si estuvieran muertos. Uvas que maduran dos meses antes de lo que acostumbraban, así como otros frutales que adelantan o retrasan su aparición.
El desierto avanza firme por la cuarta región, hacia la quinta, mientras que en Magallanes este invierno llovió con viento, algo que sólo pasa en el verano.

Ya no es un comodín hablar del clima. Porque la conversación lleva a que el clima está cambiando lo suficiente para ser capaces da darnos cuenta. Aunque los científicos-lobbistas de las petroleras (intereses que controlan la mayoría de las universidades en EE.UU,) pretendan decir que es un cambio de largo aliento y que la acción del ser humano poco tiene que ver.
El tema lo evitan en el G8, G20 y poco dice el mulato recién galardonado con el nobel de la paz (mientras reforzaba las tropas en Afganistán).

Ahora hablar del clima es incómodo. Hablar del clima es hablar de política. Es hablar de valores.

¿Por mientras? No hay de qué preocuparse, con Lagos como encargado del cambio climático para la ONU, acá siguen aprobando y echando a andar las termoeléctricas...

Por Favor, reAcciones

viernes, octubre 16, 2009

Tres reflexiones desde el miércoles


I
El himno chileno termina repitiendo 3 veces esa frase que en dictadura debió haber sido una triste ironía para varios: "...o el asilo contra la opresión". En el espacio de tiempo que hay entre cada una de las repeticiones, un grupo de 4 ó 5 intercalaban "¡Revolución!". Esto sucedía en la tribuna Caupolicán, conocida también como "sector familia", en el codo sur-oeste del Estadio Monumental. Las entradas (que habían "liberado" la semana anterior ante la poca compra de los ecuatorianos) costaban 30 lucas. 24 si se usaba la tarjeta París.
Pese a que sólo en la parte alta (para la que había que llegar muy temprano) se puede ver toda la cancha, estaba lleno. Con entradas a ese precio, ya no quedan dudas de que Bielsa fue un negocio para la ANFP.
Vuelvo a lo que les contaba: No había mucho eco en los que gritaban "¡Revolución!", nadie más se sumaba, pero tampoco nadie les reprochaba. Se podría decir que había más indiferencia que incomodidad.
Al minuto 84 del partido una plancha de Segundo Castillo impacta la entrepierna de Ismael Fuentes. Tarjeta roja.
En ese momento, uno de nuestros "revolucionarios del himno" gritó cuando ya nadie gritaba: ¡¡¡Anda a lavarte negro culiao!!!
Lo que vino a continuación no fueron risas ni más gritos. Sólo un incómodo silencio. Un silencio acusador que patrocina una extraña tolerancia que también hacía callar a quienes pifiaban el himno ecuatoriano.

Es cierto, el estadio es un lugar para muchos desahogos. Que en algunos casos llegan a la violencia física. Puede haber también en los gritos e insultos una canalización de represiones, pero parece que -al menos en esa galería- el racismo no tenía mucho arrastre.
Debo admitir que pese al contexto, me sorprendí bastante por la reacción del susodicho. Pero creo que más que por el contenido, por la soledad de su grito.
Lo que sí, es que no quiero imaginarme una revolución llevada a cabo por racistas...

II
Mismo lugar, partido a punto de terminar. 4 emocionados compatriotas están encaramados en la reja alentando. Suena el pitazo final y los 4 logran pasarse a la cancha por un punto débil que tenía el enrejado. El espectáculo -para mi gusto- es sin duda el más entretenido de la noche. Corren por la cancha, saltan, se meten a la ronda con los jugadores, los abrazan y hasta dan la vuelta olímpica. Muchos nos reímos de que lo hayan logrado, e incluso los aplaudimos cuando vuelven a pasar frente a nosotros.
Los jugadores comienzan a irse a camarines e inevitablemente los "infiltrados" van quedando en la cancha cada vez más solos.
Entonces aparecen los tipos de peto amarillo y los carabineros de fuerzas especiales: se acabó el show, tienen que irse.
En ese momento, varios de los que estaban cerca de nosotros gritaban cosas como: "¡Recién ahora vienen a sacarlos!", "¡Ya estaba bueno ya, llévenselos en cana!"
No tengo muy claro de dónde vendrá eso, pero al igual que en el caso del revolucionario-racista, también me dio vergüenza ajena oir estos gritos.

¿Es esta la expresión de la mentalidad autoritaria que tenemos muchos chilenos, aunque no nos guste reconocerlo? ¿O es realmente la expresión del resentimiento, el deseo oculto de haber estado en la cancha celebrando con los jugadores, enmascarado por un sentimiento de venganza?

Tal vez no tenga sentido plantear estas preguntas como si fueran excluyentes...

III
Más o menos al mismo tiempo, en Montevideo, Argentina ganaba 0-1 a Uruguay y se clasificaba directo. Maradona -que el sábado anterior se había inmortalizado lanzándose de guata bajo la lluvia por el gol que Palermo metía a los peruanos en el último minuto y en posición de adelanto- se despachaba "en caliente" frases para los periodistas que, según él, lo atacaron durante todo este tiempo. Básicamente les decía "que me la chupen".
Ya más frío, en conferencia de prensa reiteraba el mensaje: "que me la chupen, que me la sigan chupando". Pueden ver el video aquí.
A partir de esto se pueden decir muchas cosas.
Por ejemplo, que Maradona no tiene tolerancia a las críticas. Se tomó como ofensas la constatación de que nunca tuvo muy claro que hacer con el equipo, que jugaba mal con jugadores extraordinarios, que perdió partidos mal jugados (en los que culpó el estado de la cancha y la altura en Bolivia), que utilizó formaciones distintas en todos los partidos y que convocó gran cantidad de jugadores.
Se puede decir también que Maradona no debiera sentir como un logro el clasificar a una de las mejores selecciones del mundo en el último partido y en el último cupo directo.
Se puede decir, evidentemente que es un pésimo entrenador.
Pero lo que no debiera decirse -y que se ha dicho mucho estos días- es que "un entrenador no puede hacer eso". Frase que engloba los insultos ya citados y el guatazo de celebración en el pasto. Y no debiera decirse eso porque lo que no está en juego acá es el rol de entrenador.

Digamos lo obvio: Maradona no llegó a la selección argentina por ser un buen entrenador. Sus experiencias previas habían sido desastrozas.
Pero más aún, Maradona ni siquiera llegó a la selección argentina para ser entrenador.
Y aquí, el poder del símbolo es capaz de sobreponerse a la realidad y justificarse en base a una gran falacia: si ser de los mejores jugadores del mundo significara ser un buen entrenador, Pelé debería estar entrenando, Pellegrini jamás habría llegado al Real Madrid y Bielsa sería un entrenador mediocre.
Maradona sigue estando donde está y haciendo lo que hace (incluidos guatazos e insultos) no porque fue un gran jugador, sino porque todavía lo es.
Y eso es justamente lo que no deja ver el problema...

Por Favor, reAcciones

P.S.: Aproveché el vuelito futbolístico en estas últimas columnas. La próxima semana volvemos a la programación habitual. Gracias por la paciencia.

miércoles, octubre 07, 2009

Mirando el Superclásico: entre trágicos y exitistas

El viernes pasado recibo mensaje de un amigo en mi celular: "Tengo entradas para ir a ver a la U mañana. ¿Te animai?"
"Obvio!!!" fue mi mensaje de respuesta.

No soy hincha. Me encanta el fútbol, verlo y jugarlo, pero no tuve la suerte de ser criado como hincha de un equipo desde chico. Al final son los azares los que te ponen en la senda de uno u otro equipo de fútbol. Un hermano mayor, un padre entusiasta que te lleva al estadio, un amigo de la infancia...en fin. En la mayoría de los casos "te toca" que te guste un equipo. Y con eso te quedas.
Si el equipo que elegiste es amargo y con vocación de desilusiones, mala suerte. Si es exitoso, buena suerte. Si es el equipo de la provincia donde pasaste tu niñez, un orgullo.

Lo que sí parece ser una regla inclaudicable, es que no te puedes cambiar de equipo. Y tal vez más feo que pasarse de la Democracia Cristiana a la Alianza por un cupo senatorial, es el hecho de que Piñera -hincha histórico de la Católica- haya comprado acciones del Colo-Colo. Esa instrumental doble militancia (que replica el modelo Macri-Boca en argentina o Berlusconi-Milan en Italia), genera la desconfianza de ambas hinchadas.
Porque, insisto, el hinchar por un equipo no se elige. Se "hereda". Y como tal, no puede transarse por plata o para llegar a esos votos que cuestan.

Les decía que no tengo la suerte de ser hincha, pero que disfruto mucho con el fútbol. Desprecio pocas oportunidades para ver un partido en la tele y menos aún las escasas de ir al estadio.
Y la ocasión, el "Súperclásico del fútbol chileno", lo ameritaba.
Un verdadero espectáculo que trasciende lo que sucede en la cancha.
El no tener simpatías por el Colo-Colo pero tampoco ser hincha de la U, sumado a la deformación profesional, me sumergió nuevamente en el vicio de la observación.

Hay que decir que las condiciones eran más que privilegiadas. Mi amigo, hijo de un gran accionista de la U, tenía justo 4 entradas libres porque sus padres y hermanos andaban en otros lares. Fui el cuarto en "subirme", ya que en algún momento le había manifestado mis deseos de profitar de sus entradas VIP.

Con un pase de estacionamiento que le hicieron llegar, nos estacionamos prácticamente en el estadio cuando quedaba menos de media hora para que empezara el partido. Nos acomodamos en asientos del sector "Rapa Nui", donde había un futbolista suspendido de la U y pocos metros más abajo de las casetas de transmisión y de los palcos para los presidentes y gente muy importante y famosa. En ningún momento se nos registró, ni pasamos por detectores de metales. Por alguna prejuiciosa razón, se asume que el privilegiado no tiene interés ni la capacidad de actuar ilegalmente.

Prejuicio que se prueba una y otra vez como errado.

En fin, desde ese lugar se puede ver el partido muy bien y muy cómodo. Por supuesto, sentado. Pero no sólo eso, se puede escuchar muy bien lo que cantan ambas barras. Sobre todo porque no es un lugar para hinchar. No es galucha.
Es un lugar para ver el espectáculo. Es la tribuna privilegiada.

El partido no fue especialmente bueno, y el gol fue de aquellos que a los arqueros nos duelen tanto. Una pelota difícil por lo indefinida: ni muy fuerte, ni muy despacio, ni muy alta ni a ras de piso, con un bote a una distancia que no es ni para que salga el arquero ni para que la despeje un defensa...en resumen, un gol de mierda.
Me quedé con la sensación -muy propia de quien lo ve en el estadio- de que vi un partido distinto al que periodistas en diarios y televisión comentaron. Pero en fin.

Sucede algo interesante en el perfil de hincha de los dos equipos más grandes de Chile. Un perfil que se expresa discursivamente en los cánticos, mensajes escritos y discusiones apasionadas.
Un perfil, un par de perfiles más bien, que bien pueden hacernos pensar de cómo somos en general los chilenos.

En ambos casos, la variable socioeconómica es poco explicativa. Si bien se usa (o abusa) decir que el Colo-Colo es el equipo "popular", lo cierto es que encuentra hinchas (y no pocos) sobre la cota mil. Lo que sucedía es que hasta hace unos años esos hinchas no se atrevían a ir al monumental por el miedo (muchas veces justificado) a ser asaltados. Las remodelaciones y segmentaciones de precios en el estadio se han encargado en paliar un poco el hecho.
Con la U sucede lo mismo. Si bien en algún momento había un "sesgo universitario" en su matriz de fanáticos, es posible encontar tanto en poblaciones como en mansiones a los seguidores azules.
No es azaroso, tampoco, que las directivas de ambos grupos de accionistas provengan del mismo sector político-religioso: la derecha UDI ligada al Opus Dei. El abrazo y conversación entre Valdés y Ruiz-Tagle que pude ver a pocos metros durante el entretiempo, sellaban -simbólicamente- ese origen y espíritu que comparten.
Un gesto que es impensable entre hinchas que se enfrentan violentamente en las calles, quienes probablemente tengan problemas semejantes e intereses de clase comunes.
El fanatismo futbolístico es eficiente en mantener a los pobres separados y a los poderosos juntos.

Pero volvamos a esos perfiles. Desde un tiempo a esta parte, la descorazonada frialdad que permite el no estar comprometido con ninguno de los dos equipos, me ha permitido confirmar que el Colocolino tiene un perfil exitista mientras que el Bullanguero tiene el perfil romántico- trágico, si se me permite la metáfora.
En general los cánticos, carteles y frases que rondan al colocolino, marcándole su identidad, giran en torno a la grandeza de Colo-Colo. Ser el único chileno en tener la Copa Libertadores, así como el equipo con mayor cantidad de campeonatos nacionales, y el único (hasta ahora) en no jugar en segunda división, son hechos no sólo indesmentibles, sino que son fundacionales en el discurso del colocolino. El colocolino tiene la "discusión" cerrada en torno a cuál es el mejor equipo de Chile con esos tres datos. De hecho, no entiende cómo se puede ser fanático de equipos con vergüenzas deportivas a su haber.

Es así como el hincha de la U aparece como el trágico y romántico por excelencia. De hecho, el hincha de la U está acostumbrado a sufrir en cada partido. Eso está muy encarnado en el discurso: los partidos cuestan y siempre hay un elemento trágico-heroico en la manera como se les narra posteriormente.
El fanático de la U no tiene nada que decir con respecto a los logros del rival de siempre. No va por ahí la cosa. El fanático de la U afirma principios y sentimientos más que hechos deportivos. Y esos principios tienen que ver con la lealtad, la perseverancia y la autoafirmación. Me explico.
El bullanguero está más orgulloso de sí mismo que de su equipo. Afirma que lo más grande es su hinchada. No sólo eso, sino que es una hinchada fiel y constante independiente de cómo le vaya al equipo. Lo que hace grande a la U sería ese sentimiento de pertenencia que se sobrepone a los éxitos. Ese "aunque ganes o pierdas"...mientras que cuando el Colo-Colo va perdiendo la Garra Blanca canta "cuando el equipo anda mal, la hinchada lo hace ganar...".

Por algo es que frente a la correlación entre los campeonatos ganados recientemente y el alza de público colocolino en el estadio, el hincha azul se refiere a la "moda" del Colo. Históricamente los azules han llevado más gente al estadio ganando muchos menos campeonatos.
Y es tal vez esa diferencia de perspectiva la que los hace tan irreconciliables.

Detrás del Colo-Colo está el chileno que le gustan los logros y los éxitos. El chileno que se alegra del progreso de Chile cuando ve las carreteras consesionadas, los rascacielos, o las cifras que nos ponen como el país con mejor calidad de vida en Latinoamérica.

Detrás de la U está el chileno que se enorgullece de sí mismo. De su particularidad, del hecho mismo de ser chileno, aunque ciertos elementos de nuestra identidad tengan que ver con ser "subdesarrollados". Indiferente a las cifras, el sentimiento de pertenencia pasa a ser lo más importante y aquello que nos es propio, es lo mejor que tiene Chile. Así como cuando algo malo nos pasa (o a alguno de nuestros representantes) aflora ese discurso trágico aludiendo a que la causa está en el mismo ser chileno.

A riesgo de que esto se transforme en una infructuosa discusión de hinchadas: A usted estimada lectora y estimado lector ¿qué le incomoda más? ¿El chileno exitista o el trágico-autorreferente?

Por Favor, reAcciones

viernes, septiembre 25, 2009

El gesto de la semana: "Nada que perder"

Como ciudadano acostumbrado a votar por candidatos que no ganan, me toca lidiar mucho -directa o indirectamente- con la gastadísima frase "es que no tiene nada que perder".

Frase que hemos visto reflotar con ocasión del debate de antenoche, sobre el cual comparto varios de los análisis que están dando vueltas en torno al evento:
Piñera parecía muy nervioso y empaquetado (la camisa y chaqueta que terminaron torcidas, los tics nerviosos y verbales como decir 4 o 5 veces "le vamos a poner un candado a la puerta giratoria"...); y frente a la multa que pagó para no irse a jucio por el uso de información privilegiada, reaccionó como un patrón muy enojado. Eso no lo favorece para captar esos votos que para Lavín eran tan fáciles.

Frei fue bastante chato y su maniobra de sacarle el temita a Piñera tuvo el efecto esperado: invisibilizar a ME-O y dejar en claro que esta elección es "entre dos".

ME-O fue el que menos se salió del formato y más intentó debatir emplazando a sus contendores. Con la paradoja de que es al que menos le acomodaba el formato de hablar corto.
Sin embargo, parecía un personaje distinto al que estamos habituados. Si bien aporta nuevas ideas, se pareció a ratos mucho a los viejos políticos, alejándose de esa imagen "juvenil-díscola-rebelde" que capitaliza tanto hastío.

Arrate fue el que salió mejor parado. Expuso tranquilo, seguro y hasta con sentido del humor. Aprovechó muy bien la oportunidad frente a la escasa posibilidad que tiene de dar a conocer sus ideas en los medios (para los que sólo hay 3 candidatos).
Hasta aquí todo bien. Estoy de acuerdo. Pero los geniales "analistas" no pueden evitar decirlo:
"Claro que Arrate (con su escaso apoyo en las encuestas) no tiene nada que perder"
Y se supone que por eso, porque no tiene nada que perder, es que puede decir de forma directa lo que piensa.
Decir claramente cuáles son los valores que defiende.
Decir claramente cuál es la utopía de país que imagina y asumirse honestamente como un hombre de izquierda, socialista y allendista.

La frase no me deja de dar vueltas. Disculpen que sea tan insistente.
Pero ¿Qué significa no tener nada que perder?

¿Significa que porque no corre el riesgo de pasar a segunda vuelta, puede ser honesto?
¿Significa por descarte que, en política, los candidatos con opciones reales de disputar un cargo ocultan sus verdaderas ideas, valores y proyectos?
¿Significa que la segunda vuelta se disputa entre mentirosos, enmascarados y arteros?
En el estado actual de las cosas, tristemente, estas preguntas ya tienen respuesta evidente.

Creo que se ha instalado de manera demasiado cómoda y silenciosa el que la política no tiene nada que ver con ideales, sino que exclusivamente con pragmatismo. Las ideas son reemplazadas con slogans, los debates son sordos, las discusiones son peleas chicas y absurdas.
Pero seguimos repitiendo con mucha soltura "es que no tiene nada que perder", sin ser capaces de vernos como cómplices de la mediocridad y la falsedad cada vez que enunciamos esa frase.

O tal vez hay que darle la otra vuelta.
Pensar que tras el "nada que perder" hay una envidia. Un deseo hipócrita de poder decir las cosas por su nombre sin preocuparse por el control de daños.
Algo semejante sucede cada vez que Chávez se refiere a EE.UU. "claro, puede darse el lujo porque está sentado en petróleo".
Tal vez eso es lo que hay atrás: si estuviéramos sentados en petróleo, no nos arrodillaríamos ante EE.UU. y no ocultaríamos -con serviles tratados de libre comercio- el deseo de decirles que siempre hemos sabido que son matones entrometidos.
Tal vez si la posibilidad del poder estuviera más lejos de los candidatos, los veríamos más transparentes.

Pero eso es un lujo reservado sólo a las minorías electorales.
A los que están lejos de la necesidad, que tiene cara de hipócrita.


En cualquier caso, como dicen los taxistas, está mala la cosa.


Por Favor, reAcciones

lunes, septiembre 21, 2009

Especial: "Encuentre la gran incongruencia"


Esperando que a estas alturas las funciones cerebrales estén relativamente bien recuperadas, les propongo un juego a las estimadas lectoras y estimados lectores:

Acontinuación replicaré un pedazo de una noticia aparecida en el Diario Financiero del 17 de Septiembre y ud. podrá decir qué es lo que no le cuadra en los comentarios.

Gobierno retrasa en seis meses estimación para entrada de Campiche

La Comisión Nacional de Energía fijó el inicio de operación para enero de 2012.
Jéssica Esturillo O.

Los efectos de la paralización de las obras de la central Campiche de Gener, que ya se extiende por casi tres meses, se dejaron sentir en las proyecciones que el gobierno maneja para efectuar el cálculo de las tarifas de la electricidad.

Ello porque en el estudio preliminar de precios de nudo correspondiente a la fijación de octubre, la segunda de este año y la última antes de la entrada en vigencia de los contartos licitados por las distribuidoras, la Comisión Nacional de Energía retrasó en seis meses la fecha estimada para la entrada de esta unidad termoeléctrica (270 MW).

De esta forma, en el informe, que fue remitido ayer a las empresas de generación, la autoridad fijó para enero de 2012 el inicio de operaciones de Campiche, que a fines de junio y con un 40% de avance, fue paralizada en virtud de una resolución de la Corte Suprema que revocó su permiso ambiental.

En el proceso anterior (abril), el organismo estimó que la central comenzaría a generar en junio de 2011.

La noticia completa puede leerla aquí.

El seguimiento a este caso, que fue presentado hace un tiempo en estas páginas, aquí.

Por Favor, reAcciones

P.S.: En caso que haya todavía "endieciochamiento", o simplemente lata por buscar lo que no cuadra, le dejo las siguientes preguntas:

¿Cómo puede ser que una planta que ha sido declarada ilegal por la Corte Suprema -tras la acción interpuesta por el consejo ecológico de Puchuncaví-Quintero-, solamente se "retrase" en los planes del gobierno?

¿Qué tipo de poder puede pasar por encima de la Suprema?

¿Qué efecto generan este tipo de titulares? ¿Acaso instalar la idea de que la cosa se va a hacer igual nomás?

Un parlamentario que sólo me genera anticuerpos dijo algo sabio en torno a este caso: "En vez de que las empresas se ajusten a las leyes, el gobierno promete ajustarle las leyes a las empresas".

miércoles, septiembre 09, 2009

(sin) razones para votar por Piñera: especial programa económico

Rodrigo Vergara, propagandista de Piñera

El fin de semana que recién pasó pude infiltrarme en el encuentro anual de la Sociedad de Economía de Chile, SECHI, realizado en Antofagasta.

Nada del otro mundo. Pocos economistas (o ninguno) con visiones críticas (como los de CENDA, por dar un ejemplo), sólo una mesa dedicada a Teoría e Historia económica (con dos expositores con ponencias poco atractivas), algunas ponencias muy buenas, otras muy técnicas y matemáticamente sofisticadas, otras malas de frentón.
El denominador común: la estrechez de tiempo.

De una mesa en torno a la Salud me llevé una excelente impresión de Arístides Torche, entendí poco la compleja y sofisticada metodología de Sergio Urzúa (que expuso a una velocidad impresionate un trabajo que hizo con Gabriella Conti y el premio Nobel James Heckman), y encontré muy penca la presentación de Jean Sepúlveda (de la Universidad del Desarrollo) donde básicamente agarró datos que un par de Isapres le entregaron a Rodrigo Castro (del Instituto Libertad y Desarrollo) para que las asesorara en el tema de las licencias médicas. Se supone que Sepúlveda tenía que "ponerle teoría" (en sus palabras) a todos esos cuadros y datos. La cosa es que al final terminó concluyendo (sin que se desprendiera de los datos) que "se requiere política pública" con respecto a las licencias falsas.
Insisto, sin datos que indiquen cuántas son y cuánto cuesta eso. Política pública para que las Isapres que pagaron la asesoría no pierdan plata en licencias fraudulentas, claro está.
Su presentación, llena de baches y desconocimientos por su parte, llevó a que la audiencia se riera (burlonamente) en muchos momentos y que después lo demolieran a preguntas por su falta de seriedad.
Independiente de su carga ideológica, fue muy mala.

Pero vamos al título.
El mismo día, el cierre consistía en un panel con asesores económicos de los tres candidatos con posibilidades de pasar a segunda vuelta: Paul Fontaine por MEO, José Miguel Benavente por Frei y Rodrigo Vergara por Piñera.

La idea era saber las propuestas económicas de cada candidatura.
El lugar era el auditorio de la Universidad Católica del Norte.
El público, algo más de 100 personas. Me atrevo a decir que un 95% deben haber sido economistas.
No había cámaras, ni grabadoras, ni periodistas. O sea, la idea era tener economistas hablándole a otros economistas sobre lo que tramaban en un eventual gobierno.

En ese contexto, creo que la de Fontaine fue la mejor presentación. Expuso sobre casi todos los temas macroeconómicos dando cifras de cuánto iba a costar y cómo se iba a financiar. Aclaró los supuestos de crecimiento que tenían y presentó (con el nivel de detalle que le permitía el escaso tiempo) la interesante reforma tributaria que proponen. Además fue el único que tocó el tema de la energía (poniendo en cuestión la manera en como se fija sus precios y cómo las principales beneficiadas son las hidroeléctricas) y la necesidad de generar fuentes limpias y renovables.
{Aclaración al 10/09/09: Ahora me cuadra más la propuesta de Royalty a las hidroeléctricas, dado el conflicto de intereses de Fontaine siendo socio de empresas termoeléctricas...asumo mi ignorancia al momento de escribir originalmente esta columna.}

Benavente, que es miembro del equipo de Frei, expuso a falta de Óscar Landerretche -el encargado económico "oficial" de Frei- y como tal, se centró en lo que maneja mejor: los temas de innovación. Aclaró que el crecimiento es una deuda, pero que todas las voces autorizadas como FMI, BM y OCDE dicen que para crecer más no basta con "hacer más de lo mismo". Por lo tanto hay que fijar una agenda fuerte en el tema de innovación. Habló de eso y del I+D, del consejo de innovación y del futuro rol de Conicyt. En corto, que Chile no debiera financiar tanto investigación en ciencias básicas (mejor copiarlo) y, en cambio, desarrollar proyectos innovadores en áreas productivas concretas para generar más "riqueza". Habló también de como hay que estimular la relación entre universidades y privados en esta misma línea.

Vergara, al igual que Benavente, es miembro del equipo programático (de Piñera) pero no es su "cabeza". Más pesan ahí Larroulet, Larraín y Morandé. Y se habría agradecido tener alguno de ellos como expositores. Uno supone que habrían sido más específicos. Más serios.
La verdad de las cosas es que la propuesta económica no tiene nada de nuevo e inesperado para un derechista. Y por mucho que Piñera ande prometiendo CAMBIO, la cosa no va a cambiar mucho.
Algunas de las propuestas novedosas que puedo recordar ahora: Banco Central autónomo (tal como ya es), mantener la inflación en el 3% (lo que se ha intentado hacer siempre), mantener la tributación tal como está.
Algunas de las propuestas más propiamente derechistas: poner el 20% de las empresas públicas (incluida Codelco) en el mercado bursátil (por alguna razón no pueden decir "privatizar" de frentón...), flexibilidad laboral pactada.
Sobre el ofertón de crecer al 6% y crear un millón de empleos, no fundamentó muy bien el cómo iba a pasar.

Ahora, todo esto no es realmente lo penca. Uno ya sabe lo que piensa la derecha económicamente, que para ellos la mejor protección social es el crecimiento, que no tienen muchas contemplaciones con el medio ambiente, que le temen a la sindicalización, que quieren achicar el rol del Estado, y que creen que todo esto significa más libertad para las personas.
Y frente a eso, no tengo mucho más que agregar. El derechista en lo económico votará por Piñera y el izquierdista no. Al final, siempre los desinformados/desideologizados serán los que decidirán la elección.

Lo penca fue la forma.
Algo así como el inevitable mal gusto que tiene la derecha.
Puede ser porque casi no tienen artistas en sus filas, puede ser porque no les interese realmente, puede ser porque subestiman a quienes quieren convencer...la cosa es que en general padecen de un pésimo gusto en lo estético y las formas.
Basta con mirar lo patético del lanzamiento de Piñera. La burda imitación de campaña gringa, música "emotiva" en su discurso y mensajes de radio, un perro (Piñera de verdad cree que imitando todo lo que hace Obama, le va a ir como a Obama) al que le puso "poder" y toda la colección de frases-muletilla que tiene para referir sus críticas e ideas como si la gente fuera estúpida ("quiero ser el Bielsa de la política", "una mano dura y otra blanda", "la puerta giratoria").

Pero volvamos al tema. Intentaré describir un poco el panorama que me tuve que bancar: Vergara, vestido con pantalones café claro, chaleco azul marino sin mangas y una camisa color pastel, abre su presentación con un slogan que decía algo así como "queremos hacer posible lo que para otros es imposible". En la lámina siguiente había dos portadas de revista: una, de comienzos de los noventa, decía "El milagro económico chileno". La otra, una mucho más reciente de América Economía, "Chile, la gran siesta".
Por supuesto, esta parte de la presentación se titulaba "Del milagro económico a la gran siesta". Y mostraba básicamente como había caído el crecimiento durante los gobiernos de la concertación. De hecho, eran gráficos de barras con el crecimiento promedio para cada uno de los presidentes en democracia. Pero no contento con eso, el relleno de la barra del gráfico eran fotos de los presidentes Aylwin, Frei, Lagos y Bachelet. Como las barras se achicaban, las fotos se iban deformando cada vez más.
Brillante.
Tras un buen rato de mostrar lo mal que lo ha hecho la concertación en crecimiento, le quedaba poco rato para mostrar lo que tenía que mostrar: el programa económico de la derecha.
Parte de los puntos más relevantes ya se los dije y seguro ya se los imaginan, pero quiero volver al tema estético. En un momento quería presentar una idea en la que había 2 tareas principales que realizar. Esa lámina estaba acompañada de una foto de Churchill haciendo el signo de la paz con sus dedos. Para que nadie se confunda: 2.
En otro momento, para ilustrar que había que impulsar el emprendimiento, pero con seguridad, echó a volar la imaginación metafórica para poner una foto de trapecistas con una cama elástica abajo.
Lo peor de todo es que explicó la foto: "quiere decir atreverse volar alto, pero tener donde caer".

Era inevitable reírse en cada una de estas situaciones. Y seguramente eso hirió el ego de Vergara, lo hizo picarse y ponerse excesivamente a la defensiva. Lo que fue más patético aún.
A eso hay que agregarle esas poco creíbles afirmaciones de que Piñera tenía un promisorio futuro académico, pero que decidió volver a Chile a ser "emprendedor", por lo tanto él sabe lo que es emprender y se preocupará del emprendimiento. Estas declaraciones sucitaban una mezcla de risas y murmullos. Pero lo peor es cuando dice "perdonen, casi se me olvidaba: y ya lleva 20 años en el servicio público".
No tiene que ver con lo retorcido y poco verosímil de esa afirmación, tiene que ver con que Piñera lo ha instalado en sus discursos públicos hace un par de meses. Y se entiende que él lo haga en campaña: tiene que mentir para reducir esa brecha en la que se lo ve demasiado lejos de la calle y demasiado metido en sus especulaciones y finanzas. Lo que no se entiende es que Vergara lo haga frente a gente especialista en economía, gente que quiere oír la parte técnica del asunto.
Y tal vez eso fue lo que más marcó el mal gusto: todo el tono y contenidos de la exposición de Vergara estaban dirigidos a convencer votantes de votar por Piñera, más que a presentar la visión económica a sus colegas.
La de Vergara fue la más política de todas las presentaciones y no habiendo ni cámaras ni grabadoras, no se entendió el uso de una presentación tan burda.
Es muy probable, en todo caso, que el power point y el libreto se lo hayan hecho en el comando y no él. Mal que mal, se supone que no es tonto con un doctorado en Harvard.

Pero eso fue lo que se vio. Y con ese gusto me quedé.
Lo que me molesta de la derecha no son las obvias diferencias en lo político, moral y económico que puedo tener. Tengo grandes amigos que piensan muy distinto a mí y las conversaciones no dejan de ser entretenidas...

Lo que realmente me molesta de la derecha es que piensen que el resto de la gente es estúpida. No toda la gente, claro está. Esa gente. La gente que tienen que convencer.

La otra, la que siempre va a votar por ellos da lo mismo. Por mucho jugo que den y por muy populistas que se pongan los políticos de derecha, la derecha dura estará ahí, donde siempre ha estado.

Por eso fue tan mala la presentación de Vergara: hablarle como si fueran idiotas a un puñado de gente que tiene todos los cartones para demostrarse a sí misma que no lo son, hace que el que quede como idiota sea el mismo Vergara.

Por Favor, reAcciones

P.S.: Me percato que el título de esta columna puede ser considerado engañoso. Como no soy economista apelo a que si de verdad les interesa las propuestas económicas de los candidatos, pues las verán en los respectivos sitios.

P.D.: 23/09/2009: Sólo para echar más leña al fuego, véase esta discusión estética por una obra patrocinada por Cristián Boza, el urbanista de Piñera.